Una declaración de amor, una amistad cada vez más rota y otra que renace: el giro radical en la vida de Demir

Y hay veces en las que hay que hacer caso a lo que nos pide el cuerpo. Ugur sabe que no actuó nada bien con Sevgi y está dispuesto a remover cielo y tierra para encontrarla y pedirle el perdón que se merece.

Sin embargo, a la joven no le basta la declaración de amor y perdón de Ugur y se mantiene firme en su posición: “Me rompiste el corazón, ahora mismo no quiero verte la cara”.

La estabilidad de Ugur parece tambalearse pues ya no cuenta ni con el apoyo de Sevgi ni con la amistad de Demir.

Por otro lado, la situación entre Demir y Candan no es la más idílica. El roce del día a día y las preocupaciones de ambos hacen que se enzarcen en una discusión donde los sentimientos no se quedan escondidos y florecen por fin. Un momento esperadísimo donde Demir por fin es capaz de ser sincero y declarar su amor a Candan.

La joven tampoco se queda callada, y de una manera un poco más sutil expresa lo que ella siente: “No me quiero divorciar”.

Sin embargo, ¿es la declaración que habían soñado?

Además, el amor no es solo de pareja, sino que uno de los más leales es el que se da en una amistad pura y verdadera. La relación entre estos dos viejos amigos Demir y Cemal parece volver a cobrar importancia tras la generosidad de este último.

Demir no puede dejar de sentirse en deuda con Cemal por salvarle la vida a su hija, y por su parte Cemal se agradece que le llevara al hospital tras el disparo que recibió.

El pasado debe quedar atrás, pues como dice Cemal, las deudas deben quedarse a un lado y confiar en la oportunidad que el destino parece haberles brindado al unirles de nuevo.