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DA LA RAZÓN A LA EMPRESA
El Supremo avala el despido de una embarazada por no alcanzar los objetivos
El alto tribunal aprueba el despido de una trabajadora embarazada que se encontraba en pruebas y considera que la empresa rescindió el contrato porque no alcanzaba los objetivos mínimos fijados.
El Tribunal Supremo ha considerado ajustado a derecho el despido de una trabajadora embarazada que se encontraba en periodo de prueba al valorar que la empresa rescindió el contrato porque no alcanzaba los objetivos mínimos fijados y no porque esperara un hijo.
Según se desprende de una sentencia de la Sala de lo Social del alto tribunal el despido de la trabajadora coincidió con el de uno de sus compañeros, varón, que tampoco consiguió los beneficios exigidos para la continuación de la relación laboral.
"El trabajador varón fue contratato en condiciones y fecha idénticas a las de la mujer y en ambos casos se daba la circunstancia de que no se habían alcanzado los objetivos mínimos fijados en la contratación inicial", dice la resolución.
Ambos trabajaban como comerciales en una empresa dedicada a instalaciones y servicios y tenían estipulada una contratación mínima mensual equivalente a una comisión de 240 euros. Durante el tiempo en que prestó servicios a la empresa, la mujer generó una facturación equivalente a una comisión de 120 euros en total.
La sentencia especifica que la trabajadora despedida fue contratada cuando se encontraba embarazada de 10 semanas sin que conste de la empresa tuviera conocimiento de su estado. La rescisión del contrato se produjo en la semana 16 de embarazo.
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