Incendios
Hospitalizado un efectivo del incendio de Navaluenga (Ávila) tras una caída durante las labores de extinción
Tiene varias costillas rotas y ha sido evacuado en ambulancia.

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Uno de los componentes de una autobomba del servicio de extinción de incendios forestales del Gobierno de Castilla y León se encuentra hospitalizado en observación preventiva tras sufrir una caída durante las tareas de extinción del incendio de Navaluenga, en la provincia de Ávila. El efectivo fue evacuado en ambulancia con varias costillas rotas, según ha informado EFE en base a fuentes de la Junta.
Carlos Martínez, secretario general del PSOE de Castilla y León ha trasladado su apoyo al integrante accidentado y otro componente de las Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales del Ministerio que sufrió una ligera indisposición y fue evacuado al centro de salud. Este fue dado de alta poco después. "Seguimos el trabajo del operativo con preocupación. A todos los cuerpos que participan, gracias por vuestra labor. A la ciudadanía en general, extrememos el cuidado durante el verano", añade Martínez, conocedor de que en esta época del año la sierra de Gredos está especialmente castigada por los incendios.
El incendio de Navaluenga, originado a las 14.10 horas de la tarde del viernes 18 de julio en el paraje natural de La Chinita, ya ha afectado, según las primeras aproximaciones, a 1.500 hectáreas. Se mantiene la preocupación sobre la zona porque el fuego continúa activo, aunque se encuentre perimetrado y estabilizado.
Según han señalado los técnicos de extinción, existe riesgo de reactivación a lo largo del día a consecuencia de las condiciones meteorológicas adversas: "Ahora no hay prácticamente viento, pero a partir de la una o dos de la tarde puede incrementarse hasta los 25-30 kilómetros por hora, especialmente entre las 14.00 y las 18.00", señalaba hace un par de horas el director técnico de extinción, Alejandro Peñalvo. Junto a las rachas de viento, las temperaturas también aumentarán.
La Situación Operativa continúa en nivel 2, riesgo que fue activado en la tarde de ayer ante el peligro de que el fuego afectase gravemente a la población y a bienes no forestales, así como por la necesidad de desplegar la incorporación de medios extraordinarios.
Actualmente se encuentran trabajando en la zona un total de 48 medios entre técnicos, agentes medioambientales, cuadrillas terrestres, autobombas, bulldozer, cuadrillas helitransportadas, helicópteros o hidroaviones y otros efectivos.
Una carretera permanece cortada
Los esfuerzos ahora se destinan a tareas de enfriamiento de la zona para evitar que se reactiven los focos, la remoción y la consolidación del perímetro, que se mantiene en 26 kilómetros.
El humo y el rápido avance de las llamas a consecuencia de las rachas de viento obligó al desalojo preventivo de algunas viviendas de la zona, especialmente en la urbanización de El Quejido y las zonas periféricas de Navaluenga. Además, un campamento con aproximadamente 50 niños también fue evacuado, por lo que los menores han pernoctado en un albergue de la zona.
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