Sucesos

Detenida una mujer por estafar más de 7.800€ a clientes con discapacidades psíquicas en Valencia

La investigación comenzó tras la denuncia interpuesta por la gerente de una tienda de móviles de la localidad valenciana de Tavernes de la Valldigna.

Imagen de archivo

Imagen de archivo Guardia Civil

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La Guardia Civil de Valencia ha detenido a una mujer acusada de estafar más de 7.800 euros a clientes con discapacidades psíquicas. Esta detención ha tenido lugar en el marco de la operación 'Machungwa', que se inició el pasado mes de abril tras la denuncia interpuesta por la gerente de una tienda de móviles de la localidad de Tavernes de la Valldigna, en Valencia.

La gerente denunció que uno de sus empleados había utilizado datos de sus clientes para la compra financiada de varios terminales móviles de alta gama. Tras las labores investigadoras se pudo comprobar que la detenida, para no ser descubierta, escogía a los clientes con discapacidades psíquicas, a los que cargaba estas compras financiadas. Una vez que estos se daban cuenta y acudían a reclamar, ella nunca llegaba a cursar dichas reclamaciones. Estas compras fraudulentas las realizaba para, a posteriori, vender los productos a través de una plataforma.

La detenida, de 48 años y nacionalidad española, habría llegado a estafar más de 7.8000 euros a ocho clientes. Se la acusa de un delito continuado de estafa, dos de usurpación de estado civil y uno de falsedad documental.

El 'modus operandi'

Tras el estudio de la información recabada durante la operación, se intervinieron todos los teléfonos móviles y los agentes detectaron que la detenida seguía un mismo 'modus operandi'. La mujer anunciaba los terminales adquiridos de manera fraudulenta en una plataforma dedicada a la compraventa de productos de segunda mano. Una vez tenía un comprador, quedaba con él en las inmediaciones de la tienda donde trabajaba, acudiendo con su indumentaria de empleada e identificándose como comercial de la misma.

Una vez llegaba a un acuerdo con el comprador, la detenida le entregaba el teléfono en su caja precintada junto con una factura de venta con los logotipos comerciales de la empresa. Por este motivo, los compradores nunca llegaban a sospechar del origen ilícito de los móviles.

Tras la operación, los agentes descubrieron que la estafa había ascendido a más de 7.800 euros con ocho perjudicados. Por el momento, se han recuperado hasta cinco teléfonos móviles y las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Sueca (Valencia).

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