Alternativa al tabaco
Varias organizaciones europeas acusan a las tabacaleras de utilizar a países de la UE para frenar la prohibición de las bolsas de nicotina
Denuncian la creciente influencia de la industria del tabaco para frenar leyes que protegen la salud pública, especialmente la de los jóvenes.

Publicidad
Son pequeñas bolsitas que se colocan debajo del labio superior para liberar nicotina a través de la mucosa bucal. Una alternativa a los productos de tabaco tradicionales, ya que no requieren combustión y, por tanto, no producen humo ni olor.
Dado que no contiene tabaco, este producto no se incluye en la regulación sobre el tabaco y no le afectan las prohibiciones existentes, por lo que se vende y consume sin control. Por eso España quiere equiparar este producto al tabaco, así como los cigarrillos electrónicos o los vapeadores.
A principios de este año, España presentó junto a Francia su borrador de Real Decreto que contemplaba prohibir los sabores de los cigarrillos electrónicos y reducir al máximo del contenido nicotínico de las bolsitas. Sin embargo, seis países presentaron objeciones, retrasando su entrada en vigor otros tres meses.
Denuncias desde la UE
Ahora, varias organizaciones europeas, entre ellas Nofumadores.org, junto con la Alianza Francesa contra el Tabaco (ACT), acusan a la industria tabacalera de influir en algunos países de la Unión Europea para bloquear la prohibición de las bolsas de nicotina y los sabores en cigarrillos electrónicos.
La presidenta de Nofumadores.org, Raquel Fernández Megina, señala que el “tabaco oral y nicotina oral son la misma cosa" y que si la comercialización del primero está prohibida en la UE, salvo en Suecia, "la de la segunda también debería estarlo". Además, asegura que el interés de las tabaqueras "no es ayudar a dejar de fumar, ni proteger la salud de aquellos que fuman activa o pasivamente" sino "perpetuar las sinergias de su negocio a expensas de la salud pública".
Salud pública vs intereses financieros
Según denuncian, grandes tabacaleras como Philip Morris y British American Tobacco están utilizando su poder económico y político para frenar leyes que protegen la salud pública, especialmente la de los jóvenes. Desde las organizaciones instan a los Estados miembros a anteponer la salud pública a los intereses financieros.
Las ONG alertan de que las tabacaleras promocionan las bolsas de nicotina sintética como si ayudaran a dejar de fumar, cuando en realidad buscan atraer a nuevos consumidores jóvenes. Exigen que los países actúen con firmeza y que la Comisión Europea actualice sus leyes para frenar el poder de la industria y proteger la salud pública.
Más Noticias
-
Así es la nueva variante 'Frankenstein' del coronavirus: se cuadriplica en menos de un mes y puede ser la más contagiosa
-
Sanidad alerta por la presencia de gluten no declarado en un helado y ordena su retirada del mercado
-
El Parkinson, una epidemia que no esperábamos: "Por diagnosticar antes a una persona no la voy a curar"
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com
Publicidad