Hepatitis aguda infantil

La OMS investiga si el confinamiento y las mascarillas podrían estar detrás de los brotes de hepatitis infantil

La OMS advierte que en los próximos días se notificarán más casos de hepatitis en niños. ¿Cuál es la causa del brote?

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Recientemente la institución sanitaria de las Naciones Unidas ha emitido un informe sobre la "hepatitis aguda y grave" de origen desconocido en niños. "Desde que el 15 de abril de 2022 se publicaron las noticias sobre brotes de hepatitis aguda de etiología desconocida en el Reino Unido e Irlanda del Norte, ha habido nuevos informes continuos de casos de hepatitis aguda de origen desconocido entre niños pequeños. Todavía no está claro si ha habido un aumento en los casos de hepatitis o un aumento en la conciencia de los casos de hepatitis que ocurren al ritmo esperado pero no se detectan. Si bien el adenovirus es una hipótesis posible, se están realizando investigaciones para determinar el agente causal", ha detallado el organismo.

Según dicho informe, lo preocupante de los casos descubiertos es que son menores sanos, sin patologías previas. Al respecto, al menos 17 niños (cerca del 10% de los casos detectados) han requerido trasplante hepático urgente y se ha confirmado una muerte.

Sin armadura natural

Debido al creciente aumento de la afección, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elaborado varias hipótesis sobre el origen del brote. La primera razón a la que apunta el organismo es el confinamiento y las mascarillas, barreras que han servido para frenar el coronavirus, pero que podrían haber incrementado las posibilidades de sufrir hepatitis.

En este contexto, la OMS sugiere que en este periodo de cuarentena y aislamiento social muchos niños no se han contagiado con otros adenovirus más leves que son necesarios para el sistema inmunológico natural, por lo que ahora se enfrentan a un virus de mayor gravedad como la hepatitis aguda.

Coinfección vulnerable

La segunda hipótesis estaría relacionada con la coinfección del adenovirus del tipo F41 y el SARS COV-2, una especie de sinergia que convierte ofrece mayor vulnerabilidad al organismo y se convierte en la puerta de entrada de otros agentes infecciosos como la hepatitis.

En cualquier caso, la OMS ha argumentado que "es necesario investigar más a fondo factores como el aumento de la susceptibilidad entre los niños pequeños tras un menor nivel de circulación de adenovirus durante la pandemia de la Covid-19, la posible aparición de un nuevo adenovirus, así como la coinfección de SARS-CoV-2. Las hipótesis relacionadas con los efectos secundarios de las vacunas contra el COVID-19 no están actualmente respaldadas, ya que la gran mayoría de los niños afectados no recibieron la vacuna contra la COVID-19".

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