Tres personas fueron detenidas en el estado brasileño de Pernambuco (nordeste) acusados de haber asesinado al menos tres mujeres en el estado brasileño de Pernambuco (nordeste).
Los detenidos confesaron que consumieron parte de la carne de sus víctimas y que también la usaron para fabricar empanadas que vendieron a los vecinos, ha informado la policía.
Los acusados, un hombre y dos mujeres dijeron pertenecer a una secta que recibía órdenes de una "voz" para eliminar mujeres que consideraban malas.
Los homicidios, el canibalismo y las prácticas rituales fueron admitidas en los interrogatorios a los que fueron sometidos por la policía. La policía encontró los restos mortales de dos mujeres en el patio de la residencia en la que vivían los acusados, que fue incendiada ayer por vecinos enfurecidos.
Dos de los tres acusados de asesinar, descuartizar y comer a sus víctimas en el estado brasileño de Pernambuco (nordeste) habían filmado un película casera de terror, con escenas de canibalismo, informó la prensa digital.
El actor, escritor, músico y profesor de artes marciales Jorge Beltrao Negromonte da Silveira, de 51 años, y su esposa Isabel Cristina Pires da Silveira, produjeron y grabaron la película casera "Espírito", de 53 minutos.
La producción, en la que sus protagonistas aparecen más jóvenes, cuenta la historia de Hellen, una mujer atormentada por el espíritu del marido, un actor de nombre Emanuel Silveira, según señaló la edición en internet del diario Folha de Sao Paulo.
De acuerdo con la información, todavía no se tienen referencias de si las escenas grabadas son reales ni sobre cuándo fue producida la película, que está en manos de las autoridades que investigan los crímenes.
Las investigaciones del trío comenzaron el mes pasado luego de que Jorge Beltrao Negromonte da Silveira, de 51 años, registrara ante una notaría como de su autoría un libro escrito en 2009, al que dio el título de "Revelaciones de un esquizofrénico", en el que revela detalles de las actividades de la supuesta secta.
Además de Negromonte da Silveira, la policía detuvo a su esposa, la comerciante Isabel Cristina Oliveira da Silva, de 51 años, y a una joven de 25 años identificada como Bruna Cristina Oliveira da Silva, que vivía con la pareja y era la amante del primero.
Los tres vivían con una niña de cinco años que se sospecha que es hija de "Jéssica", una joven asesinada en 2008 cuando tenía 17 años en Olinda, uno de los municipios de la región metropolitana de Recife.
Además de las dos mujeres encontradas enterradas en el jardín de la residencia de los acusados, que habían sido declaradas como desaparecidas este año en Garanhus y de la joven asesinada en 2008, la policía investiga al trío por su posible responsabilidad en al menos otros cinco homicidios ocurridos en Pernambuco.