El niño y los billetes triturados

Publicidad

un total de 1.060 dólares (923 euros)

Un niño de dos años destroza los ahorros de sus padres en una trituradora de papel

Los padres encontraron en la basura los billetes fragmentados en mil piezas minúsculas. Los padres no han perdido la esperanza y esperan recuperar el dinero a través de la Oficina de Grabado e Impresión, que ofrece soluciones en este tipo de casos.

Un niño de dos años de Utah ha destrozado en una trituradora de papel un total de 1.060 dólares (923 euros), los ahorros de los últimos meses de sus padres.

Ben y Jackee Belnap, los padres del pequeño Leo Belnap, notaron que el sobre que contenía el dinero había desaparecido y comenzaron a rebuscar por toda la casa: debajo de las alfombras, en los cajones, en el sofá, incluso en la basura. Fue aquí donde encontraron los billetes fragmentados en mil piezas minúsculas.

Inmediatamente, asegura Jackee, supieron que su hijo Leo era el culpable. Él le había estado ayudando hacía varios días a destruir su correo basura y documentos.

Los padres no han perdido la esperanza y esperan recuperar el dinero a través de la Oficina de Grabado e Impresión, que ofrece una solución en caso de que un niño destruya cientos de dólares por accidente. De hecho, la oficina tiene la sección "División de divisas mutiladas", que se dedica a "redimir" el dinero quemado, anegado, alterado químicamente, masticado por roedores o deteriorado, un servicio gratuito para el público.

La moneda "debe enviarse a la Oficina de Grabado e Impresión para que la examinen expertos capacitados antes de que se realice cualquier canje", explican en el sitio web.

Ben Belnap cuenta en una entrevista recogida por The Washington Post, que contactaron al Departamento del Tesoro su problema, y les dijeron que les enviaran los restos del dinero.

En Twitter, Ben tomó una foto de los meticulosos esfuerzos de la pareja por separar la moneda de las otras piezas de correo no deseado, para que pudieran enviarla al gobierno. Y en un periodo de entre seis meses a tres años, podrán recuperarlo. Mientras tanto, Leo ya no usará la trituradora.

Publicidad