EEUU

Una mujer se convierte en la primera sentenciada por el asalto al Capitolio de EEUU

Anna Morgan-Lloyd, de 49 años y admiradora de Trump, pasó 10 minutos dentro del emblemático edificio. Cinco meses después, ha sido condenada por un delito menor sin pena de cárcel

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Una mujer de Indiana, Estados Unidos, se ha convertido en la primera acusada en recibir una sentencia por el asalto al Capitolio estadounidense del pasado 6 de enero, que se saldaron con la muerte de cinco personas.

Anna Morgan-Lloyd, que describió con anterioridad esa fecha como "el día más emocionante" de su vida, se ha mostrado arrepentida durante la audiencia ante el juez de la Corte de Distrito de EEUU, Royce Lamberth, según varios medios de comunicación locales.

La simpatizante del expresidente estadounidense Donald Trump, que pasó diez minutos dentro del Capitolio durante la insurrección, ha sido condenada por un delito menor -entrar sin autorización en un edificio público- y ha quedado en libertad condicional sin pena de cárcel.

Es, en cualquier caso ,la primera acusada del asalto en conocer su castigo en el marco de la investigación de los disturbios.

500 dólares de multa

Morgan-Lloyd, de 49 años, también tendrá que abonar 500 dólares de multa tras declararse culpable de este delito por entrar al Capitolio junto con la muchedumbre que protagonizó aquel asalto el pasado 6 de enero.

Durante la lectura de la sentencia, el juez Lamberth ha criticado a los legisladores republicanos por restar importancia a la violencia los hechos del pasado 6 de enero.

Lamberth dijo estar "especialmente preocupado" por los relatos de algunos miembros del Congreso de que el 6 de enero fue "solo un día de turistas caminando por el Capitolio".

El magistrado se refería a las declaraciones de mayo de un miembro republicano de la Cámara Baja, Andrew Clyde, que comparó el asalto al Capitolio con "una visita turística normal".

"No sé en qué planeta estaban... Esta no fue una manifestación pacífica. No fue un accidente que se volviera violento; tenía la intención de detener el funcionamiento mismo de nuestro gobierno", insistió el magistrado Lamberth.