Italia se moviliza en busca de un niño de 4 años desaparecido hace 10 días tras aparecer el cuerpo de su madre en un bosque

Todas las fuerzas y cuerpos de seguridad de Italia y los servicios de emergencias están buscando desde hace 10 días a un niño de cuatro años que ha desaparecido después de que su madre apareciera muerta en una bosque en Caronia, en la isla meridional de Sicilia.

La madre y el pequeño ahora desaparecido habían salido juntos con el coche de compras, según ha declarado el marido de la víctima, pero en lugar de seguir el camino hasta Messina, en Sicilia, donde estaba la tienda, se dirigió a la autopista y circuló más de 100 kilómetros en otra dirección.

Así la última vez que se vio con vida a Viviani Parisi, de 43 años, fue el pasado 3 de agosto, cuando superó una barrera de una autopista después de haber tenido un accidente.

Tras la denuncia del marido, se encontró cinco días después el cuerpo de la mujer en un bosque cercano a Caronia, al pie de una torre de alta tensión pero el pequeño Gioele sigue sin aparecer.

"Quizás fue un accidente o se sintió mal"

Según la autopsia, las heridas que produjeron la muerte de la mujer son compatibles con una caída desde la torre junto a la que estaba el cadáver, pero los investigadores aún no han determinado qué produzco la caída, es decir, si fue un accidente, un asesinato o un suicidio.

Una desaparación que tiene a un país en vilo

Toda Italia está pendiente de la búsqueda del niño, que ahora mismo se ha abierto hasta un área de más de 500 hectáreas, pero no hay ninguna pista que indique dónde podría estar o si está vivo o muerto.

De momento, lo único que ha podido confirmar el fiscal que dirige la investigación, Angelo Cavallo, es que el niño estaba en el coche con su madre cuando salió de la autopista Palermo-Messina para dirigirse a Sant'Agata di Militello, según un vídeo grabado por una cámara de seguridad privada en esta localidad.

Daniele Mondelo, el marido de Viviana Parisi y padre de Gioele, ha señalado en declaraciones al periódico 'Corriere della Sera' que su esposa vivía un momento de depresión, que se vio agravada por la crisis del coronavirus, pero aseguró que nunca haría daño al niño: "No creo que hayan matado a Viviana, pero no me quiero ni imaginar el suicidio. Quizás fue un accidente o se sintió mal. Esa mañana estaba tranquila, aunque había tenido problemas en los últimos meses".