Plan de ahorro energético

España se apagará de noche: ¿Qué planean hacer el resto de países para ahorrar energía?

Noche tras noche, los principales monumentos de Europa se iluminan. No obstante, en algunos lugares como en Alemania ya no encienden los monumentos. Hay más países de Europa que están estudiando qué medidas tomar.

Publicidad

Noche tras noche, los principales monumentos de Europa se iluminan. No obstante, en algunos lugares como en Alemania ya no encienden los monumentos. Hay más países de Europa que están estudiando qué medidas tomar. La amenaza de Rusia de un corte del suministro del gas apremia a Europa a tomar medidas de ahorro energético.

Junto al acuerdo de los Veintisiete de un recorte del 15 % del gasto para poder garantizar el abastecimiento a lo largo invierno, países como Alemania, Francia o Grecia, igual que España, ya están determinando acciones y directrices que afectan al comercio, la industria, pero también a los hogares. En Bruselas, el Atomium sigue iluminado. El Gobierno belga de momento no ha presentado un plan de ahorro energético y solo emite recomendaciones, no restricciones. Pero si lo hacen otros países de la Unión Europea.

España da luz verde a sus decretos

España es uno de los países que ya ha dado luz verde a sus decretos para ahorrar energía de cara al invierno. El Gobierno obliga a apagar los escaparates y los sistemas de iluminación exteriores a partir de las 22 horas. Además, la norma establece que, hasta noviembre de 2023, los aires acondicionados de edificios administrativos, espacios comerciales o culturales, los espacios comunes de los hoteles, cines o estaciones de transporte no deben estar por debajo de los 27 grados, mientras que en invierno los sistemas de calefacción no podrán superar los 19 grados.

Las decisiones de Alemania, Francia o Italia

Alemania es uno de los países más dependientes del gas ruso y, por ello, se adelantó al establecer un plan de emergencia energética. Para reducir la demanda, las empresas de servicios públicos ya pueden repercutir los altos precios del gas a sus clientes, según anunció el ministro de Economía, Robert Habeck. Las principales ciudades alemanas, como Berlín, Múnich o Hannover han promulgado también sus propias medidas, que implican apagar los monumentos históricos. En Berlín, la Puerta de Brandeburgo está a oscuras desde el miércoles.

El Ayuntamiento de Hannover, además, ha cerrado el agua caliente de las instalaciones públicas y permitirá activar la calefacción solo hasta los 20 grados, desde el 1 de octubre al 31 de marzo, en los edificios municipales, excepto escuelas, residencias y hospitales. Múnich también limitará la calefacción durante el invierno y apagará los semáforos en momentos de poco tráfico.

Por otro lado, el Gobierno francés ha abogado por prohibir la publicidad luminosa en todas las ciudades entre la 1 y las 6 de la mañana, con algunas excepciones como las estaciones de tren y los aeropuertos que no cierran por la noche. La ministra francesa de Transición Energética, Agnès Pannier-Runacher, anunció también un decreto que prohibirá que los comercios tengan las puertas abiertas mientras el aire acondicionado o la calefacción estén encendidos, mientras se restringe la temperatura a 19 grados en invierno y 26 en verano en los interiores.

Son medidas de ahorro energético que ciudades como París o Lyon promulgaron antes, aunque el Ejecutivo ha querido extenderlas a todo el país. Según avanzó en una entrevista Pannier-Runacher, el incumplimiento podría acarrear multas de hasta 750 euros por dejar las puertas abiertas o 1.500 euros por no apagar los carteles luminosos durante la noche.

En Italia, en medio de la crisis política que ha llevado al país a unas nuevas elecciones, el gobierno de Mario Draghi prepara un plan de ahorro de la energía que afectará a los hogares, las ciudades y las empresas, con el objetivo de reducir hasta un 20 % del consumo de gas.

En Washington, la Casa Blanca es el único monumento que apaga sus luces. Los demás permanecen abiertos toda la noche. En parte, porque es la residencia del presidente. En Rusia, la Plaza Roja de Moscú sólo se apaga un día al año

Publicidad