Rusia

Una bomba bajo el ala hizo estallar el avión de Prigozhin: el número dos de Putin sería el responsable

Un informe apunta a que Nikolái Pátrushev, secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, habría organizado el asesinato del líder mercenario por orden directa de Putin.

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Este viernes, han salido novedades sobre la muerte de Yevgueni Prigozhin, el que fuera líder del grupo de mercenarios Wagner. Según el periódico 'The Wall Street Journal', su avión fuer derribado por una bomba colocada debajo de una de las alas, en una operación dirigida por un estrecho colaborador de Vladimir Putin. El Kremlin, como suele ser habitual en esta clase de situaciones, ha calificado la noticia como "ficción barata".

El informe apunta a que Nikolái Pátrushev, secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, habría organizado el asesinato del líder mercenario por orden directa de Putin. El portavoz del presidente, Dmitry Peskov, asegura que no merece la pena ni siquiera comentar el informe y carga contra el medio estadounidense, un periódico cuyo corresponsal en el país ruso está en la cárcel acusado de espionaje.

Yevgueni Prighozin fue asesinado

Por tanto, la muerte de Prigozhin habría sido un encargo. El empresario se había convertido en una amenaza para el Kremlin y el mandatario ruso habría ordenado eliminarlo. Pátrushev, mano derecha de Putin, fue quien orquestó la operación.

La avioneta en la que viajaba el máximo responsable del Grupo Wagner no cayó porque sus ocupantes fueran borrachos e hicieran estallar una granada como indicaban los medios rusos. Una bomba colocada debajo de un ala fue lo que derribó el aparato. "Era una persona talentosa, un gran hombre de negocios que trabajó con éxito no solo en nuestro país, sino que también en el extranjero", expresó Putin después del incidente.

En el siniestro murieron otras nueve personas: otras dos figuras destacadas de la milicia Wagner, los cuatro guardaespaldas de Prigozhin y una tripulación de tres personas.

El informe también saca a la luz el papel del segundo hombre más poderoso de Rusia. Pátrushev, de 72 años, es un exagente del KGB y es la sombra del presidente desde 1999. Putin recompensó su fidelidad haciéndole jefe de los temibles Servicios Secretos y de él depende también el Consejo de Seguridad. No hay decisión que Putin no le consulte y que en su larga lista de víctimas estaría también el opositor, Aleksandr Litvinenko.

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