[[RELATEDLa OTAN abre sus puertas a RusiaRasmussen, sobre la transición en Afganistán[[/RELATED Rusia ha aceptado la oferta de la OTAN para colaborar en su futuro sistema de defensa ante misiles balísticos con el que la Alianza Atlántica pretende proteger todo su territorio. Así lo ha anunciado en rueda de prensa en el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen. "Por primera vez en la historia Rusia y la OTAN van a cooperar para defenderse", ha afirmado Rasmussen, que se ha mostrado muy satisfecho por el acuerdo alcanzado en el Consejo celebrado entre ambas partes, durante la 61 Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza que se celebra desde ayer en Lisboa. Según ha explicado, se ha acordado hacer un "análisis conjunto" de las amenazas a las que debe responder este sistema de defensa, aunque todavía no se han pulido los detalles técnicos, en los que se entrará más en profundidad en la reunión que los ministros de Defensa de la OTAN y de Rusia celebrarán el próximo mes de junio. Rasmussen, que ha calificado la cumbre de "gran éxito", ha reconocido que existen "apreciaciones divergentes" sobre "la verdadera amenaza" que suponen determinados países, sin mencionar a ninguno, pero ha insistido en la relevancia de lanzar desde hoy un "análisis común" de los desafíos. Rusia ha mantenido tensiones importantes con Estados Unidos por el conocido como 'escudo antimisiles' que intentó poner en marcha el ex presidente George W. Bush y que incluía la instalación de bases de misiles interceptores en la República Checa y Polonia. Este proyecto se abandonó con la llegada a la Presidencia estadounidense de Barack Obama, quien lo sustituyó por uno multilateral.