El PSOE ante la presión interna, en la viñeta gráfica de Alfredo Boto

El humorista gráfico Alfredo Boto ilustra esta semana en clave satírica el momento político que vive el Partido Socialista tras los últimos escándalos relacionados con el 'caso Koldo' y la investigación judicial que ha salpicado a miembros destacados de su estructura orgánica. La figura del secretario de Organización, Santos Cerdán, ha cobrado especial protagonismo tras la publicación del informe de la UCO que lo implica en supuestos pagos irregulares, lo que ha generado tensión interna dentro del partido y un creciente cuestionamiento del liderazgo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

En la imagen, representa a varios personajes caricaturizados en torno a una estatua de Sánchez. La escena muestra a tres figuras rodeando el monumento, en cuya base se lee "Pedro Sánchez, presidente de España". Una de ellas, con semblante tímido y gesto de duda, sostiene un mazo pero expresa su vacilación: "Me da cosica…". A su lado, otra figura, la cual está aparentemente más decidida, observa en silencio, mientras que el tercero, en actitud enérgica, levanta un mazo con las dos manos y lanza un grito que resume la escena: "¡¡Vamos Ábalos, barriguitas!! ¡A la de tres, lo derribamos! ¡Aúpa!".

La imagen, cargada de ironía, hace referencia directa al desgaste político que vive el núcleo duro del PSOE, especialmente a raíz de las revelaciones que implican al exministro José Luis Ábalos y al propio Cerdán. Ambos fueron piezas clave en los años de consolidación del liderazgo de Sánchez, pero ahora aparecen cuestionados por su posible relación con tramas de corrupción. La viñeta refleja simbólicamente ese giro: los antiguos aliados del presidente aparecen con mazos en la mano, en actitud de tumbar la figura que antes defendían.

Tensiones en el entorno del presidente

La representación también alude a las divisiones internas en el partido, que se han intensificado tras las declaraciones de algunos líderes territoriales y exdirigentes, como Juan Lobato, quien ha pedido recientemente un Congreso federal para debatir el futuro del PSOE. La viñeta utiliza el humor visual para subrayar la paradoja de un partido donde algunas figuras clave podrían estar participando activamente en la erosión del liderazgo que ellos mismos contribuyeron a construir.

Este tipo de sátira política se suma a una creciente presión mediática y judicial que pone a prueba la cohesión interna del partido y la capacidad de Sánchez para mantener el control de su estructura. A la espera de su reunión con la Ejecutiva y posibles decisiones que definan el rumbo del partido, el clima que refleja Alfredo Boto es el de un PSOE atrapado entre el desgaste judicial y la erosión de autoridad interna.

Una metáfora sobre el desgaste del liderazgo

El tono humorístico no resta gravedad al mensaje de fondo. La viñeta actúa como espejo del momento político actual: un presidente que, según las encuestas, ha perdido apoyo y que ahora se enfrenta no solo a la oposición, sino también a dudas dentro de su propio partido. La sátira retrata una escena que, más allá de la caricatura, revela las fisuras de un proyecto político marcado por las lealtades rotas y la incertidumbre.

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