En caso de rebrotes de coronavirus, ¿pueden las comunidades autónomas cerrar su territorio?

España estrena la nueva normalidad después de estar más de tres meses en estado de alarma para combatir la crisis del coronavirus. Esto significa que se quitan todas las restricciones de movilidad dentro de nuestro país y ya nos podemos desplazar libremente, sin necesitar una causa justificada. También se abren las fronteras con la Unión Europea, excepto con Portugal, que se abrirán el próximo 1 de julio.

El coronavirus ha aminorado su intensidad en España pero no se ha erradicado de forma completa. Las administraciones ponen el foco en los posibles rebrotes que puede haber y piden a los ciudadanos que no se relajen y sigan alerta ante el coronavirus. Los expertos ponen énfasis en la importancia que tienen las mascarillas y la distancia de seguridad para evitar nuevos contagios.

La amenaza de los rebrotes está sobre la mesa: en Pekín han tenido que aislar a miles de personas por un rebrote "extremadamente grave". Los rebrotes que se han producido en España han sido de menor intensidad y han sido controlados pero el Ministro de Sanidad, Salvador Illa, advierte: "El virus está ahí y no se le puede perder el respeto hasta que no le derrotemos, y la derrota son dos cosas: un tratamiento eficaz o una vacuna".

Ahora que entramos en la nueva normalidad, ¿qué ocurriría si se produjera un rebrote de grandes magnitudes que obligara a cerrar una parte del territorio nacional? ¿Podría una comunidad autónoma cerrar alguna de sus provincias o todo su territorio para evitar contagios de coronavirus?

La respuesta es no, esta decisión le correspondería al Gobierno Central. El pasado 12 de junio, Salvador Illa aseguró que sin el instrumento del estado de alarma, no es posible restringir de manera general un derecho fundamental como es la libertad de circulación.

En aquella comparecencia, preguntado si a medio o largo plazo, pensando en un eventual rebrote de la epidemia en otoño, el Gobierno dispondrá de una alternativa al estado de alarma para confinar a la población o limitar sus movimientos en caso de que sea necesario, Illa aseguró que el estado de alarma es un "instrumento constitucional" que se ha demostrado que "ha funcionado muy bien": "Si hay que volverlo a usar, ojalá no sea así, se usará, pero es el instrumento que hoy en día nos permite controlar la movilidad", afirma.