El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha anunciado que los líderes de la eurozona han acordado una reunión del Eurogrupo el sábado y una cumbre europea el domingo para analizar la petición que va a hacer Grecia de un nuevo programa de rescate.
Rajoy ha avanzado esta decisión de los líderes de los países de la zona euro en declaraciones a los periodistas al término de la cumbre que han celebrado los países que comparten la moneda única para intentar buscar una solución a la crisis griega tras el referéndum del pasado domingo.
El jefe del Ejecutivo español ha informado de que la decisión que se ha adoptado por unanimidad es que Grecia presentará en las próximas horas una solicitud de un nuevo programa de rescate ante el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), así como la condicionalidad de ese programa.
Ha señalado que estas propuestas las tienen que revisar las tres instituciones, se mandarán al Eurogrupo para que lo analice el sábado y el domingo lo harán los líderes de la UE en una reunión extraordinaria del Consejo Europeo. Según ha subrayado Rajoy, lo fundamental es terminar con la situación de incertidumbre que existe en la actualidad.
El presidente del Gobierno español ha confiado en que el próximo domingo, con el Consejo Europeo extraordinario que analizará la nueva petición de rescate del Gobierno de Grecia, sea la fecha final de la crisis provocada por este país.
"Espero y deseo fervientemente que esto quede liquidado el domingo y terminemos una situación de interinidad que no conducía a nada bueno, sobre todo para el conjunto del pueblo griego", ha subrayado Rajoy, quien ha recalcado que "como no podía ser de otra forma", la solución a esa crisis se hará respetando "las reglas del juego".
Menos optimista se ha mostrado el presidente del Consejo Europeo,donald Tusk quien justificó la cumbre que la Unión Europea celebrará el domingo para abordar la situación de Grecia y subrayó que hasta ese día "no se puede excluir el peor escenario".
Por su parte, la canciller de Alemania, Angela Merkel, aseguró que no habrá una quita de deuda para Grecia, aunque se mostró abierta a tratar más adelante la sostenibilidad de la misma si Grecia cumple con sus obligaciones.
"Una quita no va a producirse. Esto es un programa de rescate de la eurozona y no está permitido", señaló. "Si es necesario estamos dispuestos, después de que Grecia haya cumplido sus obligaciones, a hablar sobre la cuestión de la sostenibilidad", añadió.
