El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha destacado la trascendencia de la reforma fiscal que va a aprobar el Gobierno y ha garantizado que, en esa reforma, "el IVA se va a quedar donde está" y en ella el Ejecutivo "va a hacer lo que sabe hacer: bajar los impuestos".
Montoro se ha referido a los planes en relación con el sistema tributario en su intervención en el foro sobre la reforma del sector público organizado en el marco de la convención nacional del PP que se celebra en Valladolid y en el que ha participado junto a la presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez-Camacho.
El titular de Hacienda ha recordado la mala situación económica heredada del PSOE y ha destacado la eficacia ante ello de medidas como la reforma laboral, la del sistema financiero y la de la administración pública. Montoro ha reconocido que, para bajar el gasto público, el Gobierno ha tenido que subir impuestos principalmente, "a los que más capacidad económica tienen" y aumentar algunos como el IRPF y el IVA.
Ahora, cuando se está en la senda de la recuperación, ha señalado que va a llevarse a cabo una reforma tributaria que se abordará ya en el presente mes y a la que ha anunciado que hará alusión mañana, en la clausura de la convención, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. El ministro sí ha recalcado que "el IVA se va a quedar donde está" y ante las previsibles criticas de la oposición de que el Gobierno va a reducir impuestos como el IRPF porque se acercan las elecciones, ha rechazado ese argumento y lo ha justificado por la distinta situación económica que vive el país.
Para Montoro, lo que va a hacer el Gobierno es una modernización del sistema tributario y hacer lo que sabe hacer: "bajar los impuestos a los españoles". El ministro ha señalado que se verá si los socialistas "siguen equivocándose" no apoyando la reforma prevista y ha recordado que antes del verano el Gobierno abordará también de forma paralela la reforma de la financiación autonómica y la local.
Sánchez-Camacho también ha hecho alusión a la herencia recibida por parte del PSOE en España y del tripartito en Cataluña y ha lamentado que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, haya tomado como "excusa el independentismo, el separatismo y el victimismo" para gobernar esa comunidad. La presidenta del PP de Cataluña ha respaldado que el Gobierno vaya a dar cuenta de los datos territorializados de lo que recibe y aporta al Estado cada comunidad, y ha dicho que, con esos datos en la mano, Cataluña es la más beneficiada. Y eso, ha subrayado, lo deben saber los catalanes.