El gasto en vivienda no figura en las cuentas que Moncloa ha remitido a Bruselas

Las 183.000 viviendas públicas que el Gobierno ha anunciado recientemente no figuran en las cuentas que ha remitido a Bruselas.

En el Programa de Estabilidad, para coordinar las políticas económicas nacionales y lograr los objetivos establecidos para la Unión Europea en su conjunto, la previsión de gasto para vivienda se mantiene fija en el 0,5% del PIB, unos 6.000 millones de euros, la misma cifra que en los dos últimos años.

La hoja de ruta económica que el Ejecutivo ha enviado a la Comisión Europea, y que recoge la evolución de los presupuestos entre 2023 y 2026, también marca que la economía española crecerá un 2,1 % este año.

"El dinamismo de la actividad y la reforma laboral están llevando a un fuerte crecimiento del empleo, más estable y de mejor calidad. La buena marcha de la economía española responde a la orientación de la política económica desplegada desde 2018, impulsada por las inversiones y reformas del Plan de Recuperación y basada en tres grandes ejes: responsabilidad fiscal, justicia social y reformas estructurales progresistas", sostiene Moncloa.

En cuanto al paro, el Ejecutivo español asegura que la tasa de desempleo cerrará este ejercicio en el 12,2 % y que seguirá reduciéndose en los próximos años hasta quedar por debajo del 10 % en 2026.

"Durante los próximos años, el efecto multiplicador de las reformas irá aumentando progresivamente, hasta reducir el paro estructural al 9,0% y alcanzar un crecimiento potencial del 1,6% a partir de 2024, el doble del estimado para la economía española en 2018 (0,8%)", apunta el documento.

El Programa de Estabilidad incluye además que el déficit público se reducirá al 3% en 2024, un año antes de lo previsto debido al crecimiento económico, el control del gasto público, el incremento de los ingresos y el dinamismo del mercado laboral.

Mayor presión fiscal

Lo que también se anuncia en este plan es una subida de la presión fiscal. Según los cálculos del Gobierno, la suma de ingresos por impuestos y cotizaciones sociales marcará un nuevo máximo en 2024 y superará por primera vez el 40%.

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