Escándalo fútbol femenino
Denunciado por abusos sexuales el seleccionador de Zambia: "Si quiere acostarse con alguien, le tienes que decir que sí"
Varias jugadores del equipo han denunciado a su entrenador por conductas sexuales inapropiadas, pero la Federación de Zambia no se ha pronunciado de momento.
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Un nuevo caso de posibles abusos sexuales ha sacudido al mundo del deporte. Esta vez ha sido a la Selección de Fútbol Femenino de Zambia. Este escándalo, destapado por el diario británico The Guardian, llega unos días antes de que comience el Mundial de Fútbol Femenino, en el que Zambia comparte grupo con la Selección Española (grupo C).
Qué se conoce hasta el momento
La investigación, iniciada en 2022 y remitida a la FIFA, recoge que el seleccionador, Bruce Mwape, y el técnico de la sub-17, Kaluba Kangwa, han tenido conductas inapropiadas con las futbolistas. Además, en la denuncia se incluyen varias declaraciones anónimas de las jugadoras. "Si él (Mwape) quiere acostarse con alguien, le tienes que decir que sí. Es normal que el entrenador se acueste con las jugadoras de nuestro equipo", se ha afirmado en una de las citadas declaraciones, que ha sido corroborada por una fuente cercana a la Selección.
Esta fuente ha confirmado, además, que las jugadoras "están siendo amenazadas por si sueltan algo". Ha señalado también que "la Federación hace la vista gorda porque las mujeres han tenido buenos resultados. Es su manera de mostrar una buena imagen, aunque está feo".
Otros casos de abusos sexuales en el deporte
Por desgracia, han sido muchos los casos de abusos sexuales en el mundo del deporte. Uno de los más mediáticos fue el caso del por entonces médico del equipo nacional de gimnasia americano: Larry Nassar. Sus víctimas llegaron a casi 300 gimnastas, entre las que se encuentra la conocida Simone Biles.
Una excompañera de Biles, Maggie Nichols, fue la primera en denunciar a USA Gymnastics por los abusos que había recibido por parte de Nassar. Este fue un caso complicado, pues la policía entorpeció la investigación en varias ocasiones y se tardó un año desde la primera denuncia en arrestar a Nassar. En este tiempo, más gimnastas, entre las que también había niñas, sufrieron sus abusos.
Tras los juicios y las declaraciones de todas las víctimas que quisieron relatar lo ocurrido, Larry Nassar fue condenado a 175 años de cárcel.
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