El partido prometía una máxima igualdad y así fue. Levante y Athletic venían de empatar a un gol sus dos últimos duelos y se medían en el Ciutat de Valencia por un puesto en la gran final de Copa del Rey, donde ya esperaba el Barcelona tras su remontada al Sevilla.

Ambos equipos disputaban la posesión del balón en el centro del campo durante los primeros minutos. Ningún equipo dominaba con claridad, pero el Levante logró abrir el marcador en una gran acción de Roger Martí.

El jugador granota recibía dentro del área de espaldas a portería y lograba girarse colocando el balón al palo largo sin que nada pudiera hacer el guardameta del Athletic. El Levante tomaba ventaja en el minuto 17.

Los leones supieron reponerse al tanto local e igualaron la contienda en el minuto 30. Raúl García no falló desde los once metros. La eliminatoria volvía al empate a uno. Levante y Athletic empataban a todo y llegaba el descanso.

Tras la reanudación, mucho respeto. Ambos equipos sabían que un error podía traducirse en eliminación, y se preocupaban más por no conceder ocasiones que por irse al ataque. Los minutos iban pasando y comenzaba a oler a prórroga.

Así fue, el partido se fue al tiempo extra y ninguno de los dos equipos lograba romper la igualada. Un gol de Berenguer, con fortuna tras tocar el balón en un defensor del Levante, rompió el empate en la segunda parte de la prórroga a favor del Athletic.

Los leones jugarán dos finales de Copa del Rey en apenas 15 días. Gran eliminatoria del Levante a pesar de haber caído en la prórroga.