Neil Young, The Who y The Prodigy triunfan en la exitosa primera edición del Mad Cool

La primera jornada tuvo una genial mezcla de clásicos e indie español. Lo mejor para unos el épico concierto de The Who, que con más de 70 años siguen dándolo todo sobre un escenario y sonando gigantes. En hora y media repasaron los mayores éxitos de su carrera en un set intachable que cerraron con “Pinball Wizard”, “Baba O’Riley” y “Won’t Get Fooled Again”. Si hubiera que ponerles una pega yo diría que el sonido podía haber estado un poco más alto, pero son sólo detalles de un CONCIERTAZO con mayúsculas.

Para otros fueron unos tardíos Vetusta Morla quienes reinaron en la noche del jueves. Abarrotaron el escenario principal para repasar 16 temazos de su carrera en hora y media de show. El público estaba entregado y ellos estaban cómodos sabiendo que jugaban en casa.

El viernes la organización solucionó rápidamente los problemas de parking y con el sistema de pago. La jornada central del festival estaba repleta de nombres con tintes electrónicos que fueron los que más gustaron el público. Una actuación llena de clásicos y con el volumen por las nubes a cargo de The Prodigy convirtió el Mad Cool en una pista de baile llena de pogos. Más tarde eran los sudafricanos Die Antwoord, con su original propuesta, los que continuaban metiendo caña a los que aguantaban a los dos de la mañana.

Pero para algunos la mejor jornada del festival fue el sábado lleno de guitarras y rock and roll. En los escenarios principales al aire libre se pudo disfrutar en cadena de la potencia de Neil Young, Biffy Clyro y Two Door Cinema Club.

El cantautor canadiense dio un concierto intachable acompañado por Promise Of The Real, el grupo que lidera el hijo de Willie Nelson. La banda sonaba fresquísima y se notaba que estaban disfrutando como nunca tocando junto a Neil Young. Además el concierto fue en ascendente arrancando con un Neil en acústico tocando clásicos como “After The Gold Rush”, “Heart Of Gold” y “The Needle and The Damage Done” y cerrando de forma apoteósica. 15 minutos de “Down By The River”, 10 minutos de “Like A Hurricane” y 8 de “Rockin in The Free World” llenos de solos de guitarra y poderoso rock and roll que dejaron al público alucinados.

La noche continuo a ritmo de guitarras con unos cañeros Biffy Clyro que presentaban su nuevo trabajo de estudio pero fue con sus grandes éxitos con los que enloquecieron al público. “Bubbles”, “Black Chandelier”, “Mountains” o “Many of Horror” sonaban mucho más cañeras que en sus discos y ponían a todo el público a saltar.

La última noche del festival tuvo fiesta hasta el final primero con Two Door Cinema Club, más guitarras y el público coreando en “Something Good Can Work” y “What You Know”. Después con Capital Cities, el broche perfecto para un festival que cerró un poco pronto ¿Qué es eso de apagar la música a las 03:30?