Ha sido clave la labor de los genetistas
Es la primera vez que un equipo multidisciplinar hace una reconstrucción facial de los antiguos pobladores canarios. Y los resultados son sorprendentes. Con el proyecto Humyaga 977 se ha podido recrear la cara de una mujer de entre 25 y 30 años, que vivió en el sureste de Gran Canaria y cuyo cráneo se conservaba en el Museo Canario.
Es el cráneo numero 977 del Museo Canario. Nunca ha tenido nombre, y sigue sin tenerlo. Pero al menos ahora ya tiene rostro. Esta mujer vivió en el sureste de Gran Canaria hace 1500 años y fue enterrada en lo alto de este yacimiento de la Fortaleza, que era un templo para ellos.
Fue una de las primeras pobladoras de la isla. Vivía en un entorno violento y de difícil de supervivencia.
Golpes en la cabeza, falta de dientes... todo eso ha ayudado en la reconstrucción facial. Pero también ha sido clave en este proyecto de arqueología virtual la labor de los genetistas: El análisis de ADN.
Y que forman parte de la historia de las islas. Ahora, con esta recreación, la primera que se hace en Canarias, podemos entender mejor cómo eran los aborígenes canarios.
