Nunca el Puerto de Santa Cruz de Tenerife había tenido tanto ajetreo en una mañana: hasta 5 barcos han atracado en penas tres horas. Y los pasajeros nada más pisar tierra, a planificas las excursionesNormal que entre tanta maleta hubiese algún despistado. La llegada de estos cruceros supone un respiro económico: Cientos de taxistas y hasta 70 autobuses preparados para recorrer la isla.Y como siempre, hay quienes tienen que trabajar cuando los demás disfrutan de sus vacaciones.