El primer derbi de la temporada se saldó con un empate. Las Palmas llevó el peso del encuentro pero sin crear ocasiones. Un penalty que no fue pero complicado de ver en directo propició el gol del Tenerife. Emoción, intensidad y polémica, las esencias del derbi de ayer.
Esta fue la jugada que cambió el rumbo del partido. Fueron las presuntas manos del defensa local David García en el minuto 83 las que propiciaron la controvertida acción y la sanción del árbitro al jugador con un penalti, a quien además esta segunda amonestación le costó la expulsión, que será ahora recurrida por la Unión Deportiva.
El injusto penalti, que dejó el esperado derbi en tablas, propició al término del encuentro que el colegiado vasco pidiera disculpas al capitán local una vez vistas las imágenes de la jugada.
Habían soñado con la victoria. El choque se les había puesto de cara sobre todo gracias a este gol de Araujo en el minuto 18 de la primera parte, un tanto que fulminó a Dani Hernández. Hubo otras tantas ocasiones, como la de Cala y Timor, de cabeza, y otra de Blum en la segunda parte, que estrelló el balón en el poste tras una jugada personal y su rechazo no pudo anotarlo el delantero argentino con la cabeza, ya que Camile lo evitó en la línea de gol.
Al Club Deportivo Tenerife le costó más meterse en el partido, aunque los últimos minutos fueron para lo ellos que, con un jugador más, se hicieron con el control del juego.
