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Ocuparon las ruinas de Fraguas en la primavera del 2013

Piden cuatro años de cárcel para seis okupas de una diminuta aldea en la Sierra de Guadalajara

Fraguas era un pueblo abandonado desde los años 60 hasta que un grupo de jóvenes se instaló y rehabilitó varias de las casas. Piden para ellos cuatro años de cárcel porque la Junta de Castilla la Mancha asegura que no se puede construir porque es un espacio protegido.

Este grupo de okupas ha transformado lo que antes eran escombros en una casa con huerto, biblioteca, calefacción central, agua potable y luz. El problema es que se encuentra en un paraje natural y desde la Junta de Castilla La Mancha aseguran que es una zona de alto riesgo de incendios.

Por eso ahora 6 de los jóvenes se enfrentan a cuatro años de prisión cada uno, a pesar de que ellos defiendan que todo lo hacen respetando el medioambiente.

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