José Manuel García-Margallo, ministro de Asuntos Exteriores

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SOBRE LA INDEPENDENCIA DE CATALUÑA

García-Margallo afirma que Artur Mas es consciente de que no hay "ninguna salida"

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo ha reafirmado la posición del Gobierno sobre la independencia de Cataluña. Asegura que la soberanía pertenece a todos los españoles, por lo que si existe una declaración unilateral de independencia, el Gobierno la llevaría ante el Tribunal Constitucional, que paralizaría el proceso independentista.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha asegurado que el presidente catalán, Artur Mas, es perfectamente consciente de que no hay "ninguna salida" en el camino hacia la independencia de Cataluña. García-Margallo ha recordado que la Constitución "es muy clara" al establecer que la soberanía pertenece a todos los españoles y fundamentarse en la indisoluble unidad de la nación española.

Se ha referido a las elecciones catalanas, aún no convocadas oficialmente por Mas, para recalcar que son unos comicios autonómicos para elegir un Parlamento autonómico que, a su vez, elegirá a un Gobierno autonómico. "Punto y a la línea. Cualquier otra declaración está fuera del marco jurídico y, por tanto, no tiene validez alguna y nadie la va a reconocer", ha añadido. Ha señalado que, si los independentistas ganan las elecciones, "harán una declaración unilateral de independencia que no tiene validez jurídica de ningún tipo" y que, "como es natural", el Gobierno llevará ante el Tribunal Constitucional, lo que paralizaría jurídicamente el proceso.

El titular de Exteriores ha criticado el "daño" que está haciendo Mas a Cataluña y a su propio partido, al haber "roto" CiU y concurrir a las elecciones "en un traje de camuflaje" -la lista independentista unitaria con ERC que encabeza Raúl Romeva- porque "es incapaz de pactar con nadie". "Pueden encontrarse con un Parlamento tan dividido que esté en la extrema izquierda, en ERC y el sucedáneo que presente Podemos. Claro, el éxito de la operación es indescriptible", ha advertido.

Ha hecho hincapié en que una Cataluña independiente no sería reconocida como Estado por Naciones Unidas -necesitaría nueve votos y ningún veto del Consejo de Seguridad y dos tercios de la Asamblea General- ni por la Unión Europea, de la que estaría fuera "desde el minuto uno". "Ellos son perfectamente conscientes de que eso es un camino con ninguna salida", ha aseverado García-Margallo para quien, al igual que ha ocurrido en Grecia con Alexis Tsipras, el problema es que cuando convocas "a que te siga un pueblo a un sitio que no te lleva a ningún sitio", generas una "frustración tremenda".

Cuando hay una crisis, como la económica que ha atravesado España, los "secesionistas asoman la cabeza", ha argumentado el ministro para quien Mas "ha dejado" de ejercer el poder que ahora "está en la calle, ya no está en el Palacio Sant Jaume", sino en la Asamblea Nacional Catalana o en Omnium Cultural. Mientras, ha indicado, "llevamos no sé cuántos años en que aquí nadie se ocupa de los problemas corrientes" de los ciudadanos, a los que el Gobierno catalán no ha explicado las consecuencias que tendría una declaración de independencia.

Entre las cosas que no se han explicado y en el supuesto de que fuera adelante una declaración unilateral de independencia sin reconocimiento de la ONU ni pertenencia a la UE, García-Margallo ha citado "cómo piensa pagar" Cataluña su deuda acumulada, que es "la más alta de España", si no tienen acceso al FMI ni a la liquidez del BCE.

A esto se une que "no es verdad" el mensaje de que "las otras Españas no quieran a Cataluña", ha continuado el ministro, quien ha recalcado que la "admiración" hacia este territorio "ha sido inmensa" y ha existido siempre un "reconocimiento" de los españoles hacia "todo lo que son" en arte, cultura, literatura o deporte. Ha reconocido que habría que reformar el sistema de financiación, que fue apoyado por Cataluña pero ahora "es malo" para todas las autonomías, pero ha agregado que a "los independentistas radicales" ese tipo de acuerdo no "les llevaría a la tranquilidad de espíritu".

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