Tasio entra en pánico: ¡Íñigo se ha fugado con todo su dinero!

Las ansias de parecerse a sus hermanos y de ofrecerle a su familia un futuro mejor, llevaron a Tasio a confiar en Íñigo y a meterse en un negocio de venta de electrodomésticos que, aparentemente, daba mucho dinero.

Después de vender con éxito unas radios, Tasio quiso ir a más allá y le entregó a Íñigo todo el dinero que tenía en su cartilla para que contase con él para mover un gran lote. Y no sólo eso, el operario también tuvo que cobrar por adelantado a varios clientes y pedirle dinero prestado a Damián para recaudar la cantidad que su compañero le pedía.

Tasio se extraña cuando llama al bar en el que debía encontrarse Íñigo y le dicen que se ha marchado. Aunque empieza a ponerse nervioso, intenta mantener la calma, pero la situación empeora cuando Fina le confirma que lo ha visto irse con un petate.

Tasio se va corriendo a su habitación y se da cuenta de que las cosas de Íñigo ya no están. ¡El joven se teme lo peor! Todo apunta a que ha sido víctima de un engaño. ¿Conseguirá dar con el paradero de su compañero?