Paco es despedido de su trabajo en la comisaría al velársele un carrete de fotos importante por tener su mano herida.
Américo, que saca a relucir sus celos con Lucía, continúa enfadado con ella ya que ésta piensa seguir actuando en el Café Reyes.
Al barrio llega Nicolás, un chico guapo y misterioso que acude al Café Reyes en busca de Lupe.
Benigna, cada vez más embelesada con el comisario, descubre decepcionada que Arratia espera la visita de una mujer muy especial para él.