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Recortes

Padres de niños con cáncer de Málaga piden a la Junta de Andalucía que suba la dotación de médicos

Los padres de los niños enfermos aseguran que solo hay tres médicos oncológicos en el Hospital Materno Infantil de Málaga y que es insuficiente. El mes de noviembre se le acaba el contrato a uno de ellos y tienen miedo porque sus hijos necesitan más atención.

Nueva jornada de protestas en Andalucía por los recortes en Sanidad, donde médicos y enfermeros denuncian que cada vez hay menos personal y que la situación está al borde del colapso.

En algunos hospitales la situación es crítica y por ello, la Asociación de Padres de Niños Oncológicos de Málaga está recogiendo firmas porque a partir del mes que viene solo habrá dos especialistas para toda la provincia.

Los padres aseguran que en los últimos meses se ha reducido prácticamente a la mitad el número de oncólogos que atiende a sus hijos y dicen que esto está provocando grandes retrasos. Dicen que es muy alarmante porque son niños con enfermedades graves que en su mayoría necesitan atención y revisiones de manera permanente.

"Tienes la cita para vista tres meses y te dicen que no te pueden atender porque no hay médicos que puedan atenderte", denuncia Susana Jiménez, de la Asociación de Padres de Niños Enfermos de Cáncer.

Esta es la situación en el Hospital Materno Infantil de Málaga donde solo quedan tres oncólogos que aseguran estar desbordados. "Hay doctores que hacen turnos de 24 horas y se tienen que quedar las ocho horas siguientes a pasar consulta", explica Raúl González, padre de un niño enfermo de cáncer.

Pero el mayor miedo de estos padres es que en el mes de noviembre se acaba el contrato de uno de estos tres facultativos. Por ello, más de 8.000 personas ya han firmado esta petición a la Junta de Andalucía para que suba a cuatro o cinco la dotación de médicos en el hospital, donde reciben cerca de 50 nuevos casos al año.

Sanidad de la Junta de Andalucía responde, por ahora, que este área es prioritaria y que siempre va a estar cubierta.

Mientras, los padres siguen pidiendo uno o dos doctores más para que la salud de sus hijos solo dependa de la medicina y no de la burocracia.

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