Los datos desmienten al defensor del pueblo catalán: apenas el 1% de los operados son de otra comunidad

El defensor del pueblo en Cataluña ha encendido una guerra sobre la atención sanitaria que reciben el resto de españoles en esa comunidad. Según asegura Rafael Ribó, los pacientes de otras Autonomías, los que son derivados por su médico a Cataluña para ser operados, son los culpables de las listas de espera en esa comunidad y también del déficit de su sistema sanitario.

El caso es que Cataluña encabeza la lista negra de las esperas, con 168.000 pacientes aguardando a ser intervenidos. Además, es la tercera comunidad donde el retraso para entrar en quirófano es más largo: 146 días de media.

Según los hospitales catalanes, las personas que se operan en la región catalana procedentes de otras comunidades no llegan al 1%.

La radiografía del sistema sanitario entre Cataluña señala que hay 33,6 millones de derivaciones puntuales a la comunidad, a las que se suman 136,4 millones que son por urgencias, medicamentos y desplazamientos. La suma son los 170 millones de euros que dice la Generalitat que se le adeuda en concepto de la sanidad.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad dice que esto se compensa con los saldos positivos y negativos porque también hay muchos catalanes que viajan a otras comunidades autónomas y se les trata ahí.

El presupuesto de la Generalitat es de 8.000 millones de euros, de los más altos que tiene una comunidad autónoma, y la deuda representa 170 millones de euros, un 2,12%. Según el Ministerio de Sanidad, Cataluña se ha convertido en la primera comunidad con más lista de espera: 183.800 personas, un 11,5% más que en 2016.

En su día había un mecanismo que se llamaba el fondo d cohesión sanitaria, creado en el año 2001, donde el Estado invertía medios presupuestarios para compensar a las comunidades autónomas que recibían a ciudadanos de otras ciudades. Fue Mariano Rajoy en 2016 cuando acabó con este fondo pra que fueran las comunidades las que se compensen.