Cuatro mil personas han sido testigos esta noche en Las Palmas de Gran Canaria de que el síndrome de Down no es barrera suficiente para que el joven Héctor Santana cumpla su sueño de sentirse "reinona" de carnaval, calzarse unas plataformas de 25 centímetros y transmutarse en Drag Trisómico.
Poco antes de salir por segundo año consecutivo al escenario de Santa Catalina, el epicentro del carnaval, a competir en la preselección de la gala Drag Queen por un puesto en la final, Santana confesaba que está cumpliendo un sueño de infancia.
Este joven de 22 años, administrativo de profesión, sostiene que "las barreras no existen, salvo las que uno se pone", así que es cuestión de trabajo y esfuerzo lograr todo aquello que uno quiere.
Santana reconoce, eso sí, que para una persona con su discapacidad es un poco más complicado participar en este concurso, porque hay que interpretar una coreografía sobre unas inmensas plataformas, buscar un diseñador, un patrocinador, música y ensayar... Ensayar durante meses. Aún así, él no es de los que se rinde ante las dificultades. Santana no solo ha logrado acabar con éxito un ciclo adaptado de administrativo, sino que además nada competiciones internacionales.
Entre sus títulos deportivos, figura un subcampeonato de España y una medalla de oro conquistada en el Campeonato del Mundo de Natación para personas con síndrome de Down celebrado en Taiwán.
"Héctor es muy competitivo", señala a su padre, Francisco Santana, que subraya lo orgullosa que está toda su familia de lo que ha logrado. "Nuestro sueño es apoyarlo en todo", añade.
Y eso también incluye su empeño por competir en uno de los certámenes de Drag Queen más reconocidos del mundo: la gala del carnaval de Las Palmas, donde Drag Trisómico fue recibido el año pasado, en su primera experiencia, con división de opiniones.
Francisco Santana relata que, en 2014, hubo gente que comentó en las redes sociales que no entendía por qué un joven como él participaba en el concurso de las Drag Queen y no en la gala de integración, dirigida a personas con discapacidad.
"Esa etapa ya ha pasado", añade, mientras su hijo acaba de maquillarse y repasa los últimos detalles de su número, porque este año han sido muchas las drags que se han acercado a Héctor a animarle en su reto por "ser una más" entre las reinonas.
"Hay que decir que no hay barreras, que no hay límites, que uno mismo es el que se pone las metas", puntualiza el protagonista, quien ha mejorado su actuación con respecto al año pasado.
Drag Trisómico ha dado muestras de sus progresos y de la ilusión que le impulsa esta noche en la gala de preselección, en la que ha competido con otras 34 drags por hacerse con una plaza en la final del próximo viernes, la que elegirá la verdadera "reinona" del carnaval de "Las mil y una noches" en Las Palmas de Gran Canaria.