Incendio

El incendio en el Vall d'Aran quema 200 hectáreas y tres cabañas mientras los bomberos luchan contra las llamas

El incendio en Canejan, Vall d'Aran, ha quemado unas 200 hectáreas y tres cabañas. Los bomberos continúan en la zona para intentar apagar el fuego.

Imagen de archivo de un coche de bomberos

Imagen de archivo de un coche de bomberosEFE

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El incendio en Canejan, en la Vall d'Aran, Lleida, ha quemado unas 200 hectáreas y tres cabañas. Así lo ha indicado los Bomberos de la Generalitat y los Pompièrs d'Aran.

El fuego afecta a una zona de difícil acceso y se propaga en dos frentes, según los Pompièrs, del que el izquierdo está estabilizado. El derecho se extiende por una zona incluida en el plan estratégico de gestión sostenible de la Vall d'Aran, un documento que se considera "de mucha utilidad" para luchar contra el fuego.

Para apagar el fuego trabajan media dotación de bomberos de los Pompiérs d'Aran y de la Generalitat, así como agentes de medio ambiente del Consell General d'Aran. Este viernes también colaboró en las labores un helicóptero.

Así es la normativa

Los Bomberos de la Generalitat recuerdan que desde el pasado 15 de marzo y hasta el 15 de octubre queda totalmente prohibida cualquier tipo de quema en terrenos forestales o en franjas de 500 metros entorno a los mismos para evitar incendios. Tampoco pueden quemarse rastrojos, márgenes ni restos de aprovechamiento forestal, agrícola o de jardinería.

Queda excluida de la prohibición hacerlo dentro de las áreas recreativas o de acampada, así como en parcelas de urbanizaciones, así como la utilización de fogones de gas y de barbacoas con malla antichispas. Tampoco se puede hacer fuego por actividades relacionadas con la apicultura.

La normativa sobre fuegos para estos meses recuerda que tirar, lanzar escombros o restos vegetales e industriales de manera incontrolada puede causar un incendio. Tampoco se puede lanzar cohetes, globos, fuegos artificiales y otros artefactos que contengan fuego.

El Departamento de Acción Climática de la Generalitat puede autorizar realizar determinados trabajos o actividades que supongan un riesgo de incendio forestal, como quema por motivos fitosanitarios o prevención de incendios.

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