El menor imputado por la muerte y desaparición de la joven sevillana Marta del Castillo ha declarado que es inocente y que desconoce dónde está el cadáver de la joven.
'El Cuco' ha estado poco más de dos horas prestando declaración ante el juez de Menores número 1, Alejandro Vián. El joven está acusado de violar y asesinar a la joven sevillana Marta del Castillo la noche del 24 al 25 de enero de 2009 en una vivienda de León XIII, en Sevilla.
La Fiscalía solicita seis años de internamiento en centro cerrado, seguido de tres años de libertad vigilada, por un delito de asesinato, dos de agresión sexual -uno como autor directo y otro por facilitar la agresión sexual perpetrada por Miguel Carcaño-, y uno contra la integridad moral por el daño causado a los padres al no desvelar el paradero del cuerpo.
Momentos antes de que empezara la comparecencia del menor implicado en la muerte de Marta del Castillo, el juez de menores rechazaba la cuestión de inconstitucionalidad y la nulidad pedidas por dos de los abogados, y ordenaba iniciar la vista.
El defensor del chico había pedido la nulidad del caso porque su cliente declaró y reconstruyó los hechos sin estar presente su defensa ni sus padres. El abogado Fernando de Pablo se unió así a la petición de inconstitucionalidad planteada por el abogado de los padres de Marta.
Dos de los acusados se quedan fuera
Los abogados de Francisco Javier Delgado y de su novia María García, ambos acusados en el caso Marta del Castillo, han anunciado que elevarán una queja por el hecho de que el juez de Menores número 1 que juzga al 'Cuco', Alejandro Vián, no les haya dejado asistir como oyentes al acto del juicio oral, todo ello a pesar de que el resto de abogados presentes en la sala se han mostrado "conformes" con esta decisión.
En este sentido, el letrado del hermano de Miguel Carcaño, José Manuel Carrión, ha comparecido ante los periodistas junto al abogado de María García, José Antonio Salazar, y ha dicho estar "muy sorprendido" por la decisión adoptada por el juez de Menores, "pues esperábamos que nos dejara estar presentes en el acto del juicio", añadiendo que se trata de "un atropello a la razón y a lo que son los derechos de los ciudadanos".
