Las bajas menstruales tendrán que ser aprobadas por un médico

Con la nueva legislación del ministerio de Igualdad una mujer podrá acogerse al derecho de baja menstrual que se contempla en la Ley del Aborto si sufre menstruaciones dolorosas o incapacitantes. Tendrán la posibilidad de ausentarse del trabajo unos días, de necesitarlo. Eso si, tendrá que ser un facultativo el que conceda esos permisos a las mujeres que lo demanden, según se contempla en el anteproyecto de ley.

Esta baja menstrual será costeada por el estado. Su duración cambiará según el caso y las necesidades de la paciente. Ya se contemplaba en otros casos, como los vinculados a las enfermedades como endometriosis o los ovarios poliquísticos, que padecen numerosas mujeres y que les impide trabajar con normalidad.

Unas prestaciones que supondrán para las arcas públicas un total de 104 millones de euros al año. De esa cantidad 57 millones se destinarán al permiso prenatal. Para la baja menstrual están previstos casi 24 millones y para la baja por la interrupción voluntaria del embarazo 7,8. Para garantizar esta práctica, además, se destinan 7,5 millones y para atención especializada la misma cifra, como cantidades principales.

La ley se aprobó ayer en Consejo de Ministros y recoge varios cambios respecto a la legislación de 2010. No solo en esta baja laboral. También en cuanto a la interrupción voluntaria del embarazo, se permite que las menores de 16 y 17 años puedan interrumpir su embarazo sin consentimiento de sus padres.

Se tendrá que garantizar que esta práctica se pueda realizar en los centros sanitarios públicos. También habrá un registro de conciencia para los profesionales que no quieran practicar la interrrumpción del embarazo. En cuanto a los métodos anticonceptivos se establece que los centros de salud puedan suministrar de forma gratuita la píldora del día después.

Lo que finalmente no saldrá adelante es la bajada de la conocida como "tasa rosa", como se conoce al IVA para los productos de higiene femenina. Continuará en el 10%, a pesar de que el ministerio de Irene Montero pretendía que descendiese hasta el 4%. Montero asegura que retomarán esa negociación más adelante para que esos productos sean más económicas para las mujeres.

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