EBAU

La alumna surcoreana Hai Park alcanza la nota más alta en la EBAU de Madrid

Hace 10 años que la alumna llegó a España. Con un 10 de media en el Bachillerato y en la prueba de acceso a la universidad, se matriculará en Derechos y Estudios Internacionales.

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Llegó a España con 8 años y tuvo que aprender a hablar el idioma. Hai Park, nacida en Corea del Sur, ha obtenido la nota más alta de la EBAU en la Comunidad de Madrid. Estaba jugando a un videojuego cuando su madre le dio la noticia. La Universidad Carlos III de Madrid -en la que se examinó- había llamado para comunicárselo.

La joven de 18 años desvela cuál ha sido su técnica de estudio: "Lo que hacía es practicar todos los días y preguntar a los profesores para que me revisaran", cuenta en una entrevista a la agencia EFE. "Siempre tienes algún fallo, aunque no lo creas. Sé que cometo errores e intentaba que no me pasará en el examen", añade.

Sin embargo, su sensación al salir del examen no fue buena. "Estaba muy insegura. Segura de que me había salido fatal y no iba a llegar a la nota de corte", recuerda Hai Park. Ahora, más tranquila, sabe que accederá al grado que quería estudiar, Derecho y Estudios Internacionales en la Universidad Carlos III de Madrid, con un 13,48 de nota de corte. "Quiero intentar que la Justicia prevalezca y ayudar a la gente con mi conocimiento de derecho", aclara la joven.

Reacciones de su entorno

La alumna ha cursado el Bachillerato de Ciencias Sociales en el Instituto Jaime Ferrán de Collado de Villalba, en el que también ha obtenido un 10 de media. El director del centro, Pedro Escobar, la describe como "muy trabajadora, buena estudiante y respetuosa".

En Hai Park "se han unido el talento y la capacidad de trabajo que tiene. Se lo toma muy en serio", declara el director. Es por ello que Escobar la ve perfectamente preparada para la universidad: "Es una chica muy responsable, ahí está la clave", reconoce el director del instituto.

Lo mismo opina su profesora Amaia. "Lo que se propone, lo hace. Todo lo asimilaba y al minuto lo sabía. Va a poder hacer lo que quiera", dice la docente. Amaia destaca, además, el compañerismo de su alumna. Lucía es una de las estudiantes que compartía clase con ella y comenta que "ha sido fantástico tenerla a mi lado, siempre que tenía algún problema me ayudaba".

Su madre, Gracia, no puede ocultar su felicidad. "Estoy muy contenta y orgullosa de mi hija", reconoce. La joven agradece a su madre el apoyo recibido durante el proceso. "Me ha cocinado muy buena comida", cuenta entre risas.

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