El Clínico San Carlos incorpora la primera sala de Cardiología Intervencionista sin radiación del mundo

El Hospital Clínico San Carlos de Madrid ha dado un paso adelante en el ámbito de la Cardiología Intervencionista tras inaugurar la primera sala sin radiación del mundo destinada a este tipo de procedimientos cardiovasculares invasivos. Este nuevo avance tecnológico forma parte de la profunda remodelación de su área de Cardiología, tras una inversión de 4,3 millones de euros realizada por el Gobierno de la Comunidad de Madrid, lo que sitúa a este centro sanitario a la vanguardia europea en esta especialidad médica.

La consejera de Sanidad, Fátima Matute, ha visitado las nuevas instalaciones, destacando las posibilidades que ofrece esta nueva infraestructura pionera: "La denominada Sala Zero permitirá llevar a cabo procedimientos cardiovasculares guiados por navegadores, para ofrecer una respuesta eficaz a cualquier problema de salud", ha subrayado.

Tecnología 3D para intervenciones más seguras

La principal novedad de esta sala reside en su capacidad para realizar procedimientos complejos guiados por reconstrucciones tridimensionales del corazón en movimiento, eliminando completamente el uso de rayos X. Este avance permite a los facultativos trabajar con mayor precisión en la colocación de catéteres y dispositivos intracardiacos, reduciendo el riesgo tanto para los pacientes como para los profesionales sanitarios.

El área de Cardiología Intervencionista renovada cuenta con un total de seis salas: tres destinadas al tratamiento de arritmias, incluida la Sala Zero, y otras tres para procedimientos de hemodinámica. Además, estas salas han sido diseñadas con tecnología de última generación que permite integrar distintas modalidades de imagen diagnóstica como la fluoroscopia, ecografías intracardiacas, tomografía axial computerizada (TAC), ultrasonidos intravasculares o tomografía de coherencia óptica.

Mayor precisión, menor tiempo de espera y procedimientos menos invasivos

Según han destacado desde el Gobierno regional, estas nuevas tecnologías permiten una localización más precisa de las lesiones coronarias, agilizan los tiempos de espera para los pacientes y minimizan la exposición a radiación. Al mismo tiempo, facilitan la aplicación de tratamientos mínimamente invasivos en procedimientos altamente especializados.

Entre las intervenciones que se realizan actualmente en estas instalaciones se encuentran estudios electrofisiológicos, ablaciones con catéter, implantación de marcapasos y desfibriladores, colocación de prótesis valvulares y dispositivos especiales para el cierre de orejuelas o comunicaciones interauriculares. Además, el centro también está preparado para realizar tareas de alta complejidad, como la implantación rápida de dispositivos de asistencia ventricular o la extracción de trombos en casos de embolia pulmonar.

Una referencia internacional en cardiología

La remodelación también ha incluido una reorganización integral de los espacios de trabajo con el objetivo de mejorar los circuitos asistenciales y humanizar el entorno hospitalario. Los profesionales sanitarios ahora trabajan de forma más coordinada en un mismo entorno, lo que facilita la respuesta ante imprevistos y mejora la eficiencia de los equipos, reduciendo el estrés y la fatiga del personal.

A esta modernización se suma el hecho de que el equipo del Clínico San Carlos ha sido pionero en técnicas innovadoras como los implantes de válvulas por vía percutánea, los marcapasos sin cables o el tratamiento de placas de calcio mediante ondas de choque.

Cada año, la Unidad de Hemodinámica de este hospital lleva a cabo más de 4.000 cateterismos, supera el millar de angioplastias coronarias y realiza más de 500 procedimientos de intervencionismo estructural. Por su parte, la Unidad de Arritmias efectúa anualmente unos 100 estudios diagnósticos, 600 ablaciones terapéuticas y la implantación de más de 650 dispositivos como marcapasos, desfibriladores o holter.

Más del 30% de la población sufrirá patologías cardiovasculares

El jefe del Servicio de Cardiología del Clínico San Carlos, Julián Pérez Villacastín, ha recordado que "las estimaciones apuntan a que más del 30% de la población adulta sufrirá alguna patología de estas características, infarto, ictus, insuficiencia cardiaca, a lo largo de su vida". Por ello, considera esencial seguir apostando por la innovación tecnológica para ofrecer tratamientos cada vez más seguros y eficaces a los pacientes.

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