Rober Tufts, de 4 años, en plena campaña electoral para ser reelegido alcalde

Aunque en realidad la localidad carece de Ayuntamiento y es gobernada por otro Consistorio, el pequeño Robert se toma muy en serio su cargo desde que fue nombrado alcalde con 3 años.

Todo empezó cuando su madre diseñó un cartel publicitario para el restaurante en el que trabajaba. En éste salía el niño con un gran helado y la frase "Elija a Robert Tufts como alcalde", pues éste prometía que velaría por una alimentación saludable si llegaba a alcalde. Ahora que lo ha conseguido, su política está centrada princpalmente en convertir el helado en la principal comida del pueblo.

Dorset es una localidad muy pequeña, cuenta con 30 habitantes. La elección de su alcalde es algo simbólico que se lleva a cabo en las fiestas del pueblo. Pagando tan solo un dolar, cualquiera puede escribir el nombre de su candidato en una papeleta e introducirlo en un sombrero. Otros años han llegado incluso a presentar a un gallo, que además fue derrotado por un perro.

Ahora Robert busca votos para volver a ocupar el puesto. Según Kathleen Schmidt, dueña de una tienda de ultramarinos en Dorset, Robert es el favorito. "La mayoría de nosotros lo respaldamos porque es encantador", asegura.  Y es que el niño es muy respetado entre sus vecinos.