Los niños tailandeses o la niña estadounidense que estuvo 58 horas en un pozo, entre las esperanzas del rescate de Julen

El caso de Julen nos recuerda a los de otros niños atrapados que nos mantuvieron en vilo. El tiempo y la serenidad son dos factores clave para los técnicos del rescate.

Recordamos el caso de los 18 días que tardaron en rescatar a doce niños tailandeses y a su entrenador de una cueva. El buzo español Fernando Raigal participó en esa operación de rescate y asegura que "mantener una actitud positiva en todo momento es muy importante".

La aventura de los pequeños futbolistas acabó de la mejor forma. Raigal cree, no obstante, que "siempre debe existir un plan B por si las cosas se tuercen y se presentan imprevistos".

Otro caso que dejó en vilo fue el de una niña, Jessica McClure, de año y medio en Estados Unidos en 1987. La pequeña jugaba en el patio trasero de su casa cuando cayó en un pozo. Tras 58 horas de pesadilla, lograron sacarla con vida. Los medios de comunicación transmitieron en directo todo el proceso.

Durante los últimos años, hemos sido testigos de muchos rescates de niños. Pequeños atrapados en pozos, entre dos paredes, o incluso en lavadoras. La mayor parte de estas operaciones, afortunadamente, han tenido un final feliz.