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IMPULSADA POR SALVINI

El Parlamento de Italia aprueba la polémica ley de inmigración y seguridad

Con esta polémica ley se suspenderán los permisos de residencia por motivos humanitarios que daban acceso al mundo laboral y a la seguridad social a los refugiados. Además alargará el plazo por el que los inmigrantes pueden permanecer en los centros de identificación y se destinarán más fondos para la repatriación voluntaria de inmigrantes.

El Parlamento italiano aprobó una ley que entre otras cosas introduce restricciones para los solicitantes de asilo y amplía las posibilidades de revocar su protección, además de introducir medidas contra la mafia y para la seguridad ciudadana.

La medida, impulsada por el líder de la ultraderechista Liga y ministro del Interior, Matteo Salvini, fue presentada en las dos sedes parlamentarias como una moción de confianza al Gobierno, técnica usada para evitar las enmiendas y abreviar su aprobación.

La Cámara de los Diputados aprobó la moción por 336 votos a favor y 249 abstenciones, después de que el pasado 7 de noviembre fuera aprobada por el Senado. Ahora falta la revisión de una serie de órdenes del día y después se procederá a la aprobación final de todo el proyecto de ley, que.

Unas 200 personas se manifestaron a las puertas del Parlamento para mostrar su rechazo a esta polémica ley y escenificaron un funeral por los derechos, bajo denuncias de racismo. Salvini expresó en rueda de prensa su "enorme satisfacción, no como ministro, sino como ciudadano italiano", pues, aseguró, la norma "dará más tranquilidad, orden, reglas y serenidad a las ciudades".

La nueva ley se articula en tres pilares: inmigración, seguridad pública e impulso a la lucha contra el crimen organizado.

En materia de inmigración se suspenden los permisos de residencia por motivos humanitarios, que se concedían durante dos años y daban acceso al mundo laboral y a la seguridad social a los refugiados, y en su lugar se introducen permisos de un año de "protección especial". Además, se negará o rechazará la protección internacional en caso de que el inmigrante sea condenado en vía definitiva, también por los delitos de violación, venta de drogas, robo o extorsión, y se declara como "delito de particular alarma social" la mutilación genital.

La nueva ley alargará el plazo durante el que los inmigrantes podrán permanecer en los centros de identificación, pasando de los actuales 90 días a 180, un periodo que el Gobierno del euroescéptico Movimiento 5 Estrellas y la Liga consideran oportuno para identificar al solicitante. Además, se destinan más fondos para la repatriación voluntaria de inmigrantes y se retirará la protección a quienes regresen a su país de origen, si no es por "graves y comprobados motivos".

Sobre seguridad pública, la nueva ley estipula que las empresas de alquiler de vehículos comuniquen a la policía los datos de sus clientes para comprobar su historial y evitar así posibles atentados por atropello como los sucedidos en Niza, Berlín o Londres. Permitirá a los agentes de ciudades con más de 100.000 habitantes el uso experimental de la pistola eléctrica Taser, y los clubes de fútbol deberán aumentar su aportación a la seguridad de los estadios, destinando entre el 5% y el 10% de la venta de billetes.

La ley extiende el conocido como 'Daspo', la prohibición de acceso a espectáculos deportivos para personas que hayan manifestado una conducta agresiva o peligrosa, que será aplicado también en áreas dedicadas a ferias, mercados y en hospitales.

Por último, en cuanto a la mafia, esta nueva medida incrementa los recursos destinados al ente que gestiona los bienes incautados a los criminales y liberaliza estas propiedades, que podrán ser ahora compradas por privados "con rigurosos controles" para que no vuelvan a manos de los clanes.

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