La familia de Foley hace público el mensaje que recibieron del Estado Islámico

La familia de James Foley, el periodista decapitado por el Estado Islámico, hizo público el email que recibieron del grupo islamista en el que se les avisaba de que su hijo sería asesinado como venganza a los bombardeos llevados a cabo por Estados Unidos en Irak contra sus posiciones.

El texto, publicado íntegramente por Global Post, medio para el que trabajaba Foley, se titula "Un mensaje al gobierno estadounidense y sus ciudadanos borregos" y el grupo yihadista asegura en él que el gobierno norteamericano ha tenido "muchas oportunidades de negociar la liberación de su gente", mediante el pago de un rescate millonario como "aceptaron otros muchos países".

A su vez, el EI afirma que Estados Unidos rechazó liberar a prisioneros del grupo como método de negociación. "Los norteamericanos no teneis motivación para tratar con los musulmanes excepto mediante el lenguaje de la fuerza", declararon en el comunicado, reiterando su rechazo total a los bombardeos sobre Irak que el Gobierno de Obama está llevando a cabo en las últimas semanas.

EI amenazó también en el correo electrónico que no pararán hasta que "Estados Unidos pague el precio de sus bombas". "El primero será el ciudadano americano James Foley. Será ejecutado como un resultado directo de los ataques sobre nosotros", finalizan en el comunicado.

Con respecto a esto, el hermano de James, Michael Foley, aseguró que su familia siempre pensó que se estaba haciendo "un gran progreso" en la liberación del periodista. Pero cuando Estados Unidos comenzó a bombardear Irak, la familia perdió toda la esperanza. "Es horrible lo que ISIS está haciendo a los ciudadanos y extranjeros allí y algo tiene que hacerse. No creo que algunos bombardeos sean suficientes para acabar con el grupo", afirmó Michael.

Ante estas críticas recibidas, no solo de la familia Foley, la Casa Blanca hizo público este miércoles que un grupo de Operaciones Especiales del ejército americano intentó, aunque sin éxito, rescatar al periodista, que desapareció en Siria el 22 de noviembre de 2012.