Portugal

Dimite el primer ministro de Portugal, António Costa, al ser investigado por delitos de corrupción

La fiscalía lusa está investigando al primer ministro del país y a varios miembros del Gobierno por supuesta prevaricación y corrupción.

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El primer ministro portugués, António Costa, ha presentado su dimisión, después de que la Fiscalía le incluya en una investigación por presuntos delitos de prevaricación y corrupción. "En estas circunstancias, obviamente, presenté mi dimisión a su excelencia el presidente de la República", anunció en una intervención televisada, en la que expuso que el cargo de primer ministro no es compatible con la "sospecha de la práctica de cualquier acto criminal".

"Fui hoy sorprendido de que ya se ha instaurado contra mí una causa criminal, obviamente estoy totalmente disponible para colaborar con la Justicia en todo lo que entienda necesario para apurar toda la verdad sea de la materia que sea", ha expresado Costa.

Costa también ha anunciado que no se presentará a las próximas elecciones. "Cierro una etapa con la conciencia limpia", ha dicho.

El presidente Rebelo de Sousa ha aceptado la dimisión presentada por Costa y ha anunciado que ha convocado a los partidos con representación parlamentaria para este miércoles y un día después un Consejo de Estado, tras el cual se dirigirá al país desde el Palacio de Belém.

Costa pone punto y final a su etapa socialista

El exalcalde de Lisboa, que dio el salto al principal cargo político del país en 2015, deja al Partido Socialista con una mayoría absoluta en el Parlamento.

Costa, de 62 años, estudió de Derecho, aunque lo que comenzó siendo una carrera en la abogacía derivó en la política que se consolidó a mediados de la década de los noventa, cuando ascendió a la ejecutiva del Partido Socialista y se incorporó como ministro en sucesivos gobiernos, primero de la mano de António Guterres y luego bajo la batuta de José Sócrates.

En las elecciones de 2019, el Partido Socialista (PS) ya fue el partido más votado, aunque no alcanzó el umbral de la mayoría absoluta, lo que le obligó a depender de nuevo de apoyos externos. Sin embargo, las discrepancias entre las formaciones provocaron que los portugueses acudieron a las urnas de manera anticipada y el PS logró entonces la mayoría absoluta que se le había resistido.

Investigan delitos de prevaricación y corrupción

La Fiscalía investiga investiga por supuestos delitos de prevaricación, corrupción y tráfico de influencias a António Costa, primer ministro de Portugal, y a varios miembros del Gobierno.

La Policía de Seguridad Pública (PSP) y la Autoridad Tributaria y Aduanera han registrado más de 40 lugares, entre ellos, "espacios utilizados por el jefe de Gabinete del primer ministro". Algunos medios locales informan de que los agentes también registraron la residencia oficial del primer ministro, António Costa.

En los registros se incluyen las sedes de los ministerios de Medio Ambiente e Infraestructuras, así como en varias oficinas del Palacio del Sao Bento y la residencia oficial del primer ministro, António Costa, para examinar en concreto el despacho de su jefe de gabinete, Vítor Escária, quien ha sido detenido.

La investigación se centra en las concesiones de explotación de litio en las minas de Romano y Barroso y de un proyecto de una central de producción de energía a partir de hidrógeno y otro para la construcción de un centro de datos, ambos en Sines, recoge la agencia de noticias 'EFE'.

Varios ministros sospechosos

El ministro de Infraestructuras, João Galamba, y el presidente del Consejo Directivo de la Agencia Portuguesa del Ambiente están declarados como sospechosos -figura previa a la acusación-.

Además del jefe de gabinete, Vítor Escária, también han sido detenidos, el alcalde de Sines, el socialista Nuno Mascarenhas, y del empresario Diogo Lacerda Machado, amigo íntimo de Costa.

Participan en el operativo 17 magistrados de la Fiscalía lusa, tres magistrados judiciales, dos representantes del Colegio de Abogados, cerca de 145 agentes de la PSP y nueve de la Autoridad Tributaria.

La oposición pide elecciones anticipadas

La oposición conservadora en Portugal celebra la dimisión de António Costa y piden al presidente Marcelo Rebelo de Sousa que convoque elecciones anticipadas "lo más deprisa posible" porque "no es posible sustituir" a Costa por "cualquier otro ministro" del actual Gobierno socialista.

Para el líder de Chega!, aquello que no pase por disolver la Asamblea y acudir a las urnas "atrasará el proceso político del país". En la misma línea se ha manifestado el líder de los liberales, Rui Rocha: "No creo que haya una solución que no sea la disolución de la Asamblea de la República y elecciones para que los portugueses se puedan pronunciar (...) Es urgente una nueva solución política".

"Es tiempo del presidente de la república (...) para escuchar a los partidos y a los consejeros de Estado para tomar sus decisiones", ha dicho el diputado Rui Tavares del partido Livre, en relación al encuentro del miércoles de Rebelo de Sousa con representantes de las fuerzas parlamentarias.

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