Se cambian juguetes por armas

La masacre de la escuela de Río de Janeiro el pasado jueves, fue perpetrada con dos revólveres comprados de manera ilegal. El autor de la tragedia, adquirió uno de ellos por 165 dólares, para matar a 12 niños, y suicidarse después. Eran sólo dos de las ocho millones de armas de fuego clandestinas que circulan en el mercado de la violencia de Brasil.

La ONG Sou da Paz lucha por evitar el fácil acceso a las armas de fuego, Alicie Ribeiro forma parte de esta agrupación y destaca que situaciones como la masacre que ha conmocionado al país en los últimos días reflejan que acceder a las armas en Brasil "está fuera de control", ya que obtener un arma para ese crimen fue "muy fácil". Ahora, el debate se ha reavivado tras la tragedia. El presidente del Senado ha propuesto convocar un referéndum para prohibir la venta de armas en el pais.

Uno de los colectivos más importantes para erradicar el interés por las armas son los niños. La policía brasileña ha lanzado una campaña para concienciar a los más pequeños sobre la violencia. Consiste en que entreguen sus armas de juguete a cambio de un regalo.

En 2005 los brasileños rechazaron prohibir el comercio de armas...Ahora, vuelve a abrirse el debate sobre el desarme de la sociedad brasileña