Así es la vida en 'La Jungla', el macro asentamiento de inmigrantes en Calais

‘La Jungla’ comenzó como una pequeña comunidad establecida cerca de la entrada del Eurotunnel, donde los inmigrantes esperaban a la llegada de las horas de la noche para intentar superar las medidas de vigilancia que les separan de atravesar el Canal de la Mancha.

Sin embargo,  a día de hoy el asentamiento ha evolucionado a una pequeña ciudad con vida propia que alberga a personas que originalmente vienen de Sudán, Eritrea, Afganistán, Siria y Libia.

Según el Daily Mail, actualmente cuenta con su propia iglesia y mezquita, una tienda de alimentación y de electrónica e incluso una red eléctrica pirateada que da luz a las edificaciones más importantes y que ha dado lugar a la creación de un punto para cargar móviles e incluso una peluquería.

Asimismo, los inmigrantes en el asentamiento también han encontrado la forma de conseguir fuentes alternativas de agua, que utilizan para el aseo y sobre todo para limpiar los restos fecales.

De hecho, la limpieza y la insalubridad en ‘La Jungla’ es uno de los aspectos que más preocupa a las autoridades locales, situación que tratan de paliar desplegando más baños portátiles.

Por su parte, el aspecto de la comida queda parcialmente cubierto con los víveres que las autoridades reparten una vez al día, aunque también se ha descubierto que se ha creado una suerte de mercado negro: Vecinos de Calais hacen contrabando con bienes de primera necesidad e incluso con tabaco, alcohol y otras sustancias.

Además, aparte de la mezquita, una gran tienda de campaña verde con inscripciones en árabe, y de la iglesia, una edificación hecha con ramas de madera en las que se ha colgado una cruz y diversas fotos de Jesús y de otros motivos religiosos, se ha construido una escuela.

‘L’Ecole laique du Chemin des dunes’ es el nombre que se le ha dado a este colegio que alberga a algo más de 20 estudiantes donde se imparte un nivel básico de inglés y francés.

Durante el día, los inmigrantes se pasan las horas del día reponiendo fuerzas para que cuando lleguen las horas de la noche, formar grandes grupos que intentarán asaltar la entrada del túnel que cruza el canal de la Mancha.

Aun así, diferentes ONGs asisten a los inmigrantes y están intentado iniciar un proceso para que algunos casos extremos puedan pedir asilo tanto a Francia, como a otros países europeos.

Actualmente, uno de los mayores miedos de las autoridades locales es que el asentamineto se establezca definitivamente evolucionando a una favela.