Polémica en Reino Unido por el algoritmo que decide las notas de los estudiantes británicos

El coronavirus ha obligado a muchos gobiernos a tomar decisiones atípicas, y el de Reino Unido no es una excepción. La administración británica ha decidido cancelar los exámenes finales de secundaria, conocidos como A-Levels. En principio serán sustituidos por un algoritmo que se encargará de poner las notas de los alumnos, pero esta decisión ha suscitado críticas, que han desembocado en protestas multitudinarias de los estudiantes.

Según varios medios ingleses, el motivo de la polémica es que este algoritmo no sólo tiene en cuenta cosas que dependan del estudiante, sino también factores externos como el historial del centro educativo. Algo que puede generar desigualdades entre los alumnos de distintas clases sociales.

El 60% de las calificaciones de A-Level de este año se han puesto mediante modelos estadísticos, es decir, no han tenido en cuenta las notas puestas por los profesores. Algo que puede provocar que un alumno de una escuela de bajo rendimiento tenga una nota más baja de lo que merece, porque los estudiantes del año anterior consiguieron peores resultados.

Son muchos los estudiantes que han protestado porque se les ha bajado nota final después de que el algoritmo defendida por la Oficina de Regulación de Calificaciones y Exámenes haya reconocido sus datos,

Una decisión en el aire

Ante las protestas, la Primera Ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, ha decidido anular los resultados y permitir que los alumnos utilicen las calificaciones que habían previsto sus profesores.

Pese a esto la comunidad educativa británica sigue protestando por los resultados, lo que también ha llevado a la Oficina de Regulación de Calificaciones y Exámenes a cambiar de opinión. Finalmente se permitirá que los estudiantes puedan recurrir sus calificaciones utilizando las notas previstas por sus profesores.