Viviendas en alquiler

El infierno del alquiler no acaba: los abusos económicos a los que se enfrentan los inquilinos por parte de las inmobiliarias

Subidas en el precio del alquiler que superan el 2%, el pago de los honorarios de la agencia o tener que dejar la vivienda antes de lo acordado son situaciones a las que se siguen enfrentando muchos inquilinos.

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Llega septiembre y esto supone un problema para todos aquellos que buscan vivir de alquiler. Principalmente, se debe a la alta demanda en las grandes ciudades, lo que causa la desorbitada subida de los precios, tanto por habitación como por vivienda. No obstante, esta presión del mercado de la vivienda no es ninguna novedad. Los abusos económicos e incumplimientos de contrato se han ido denunciando con el tiempo y esto obligó, en febrero de este año, a una reforma de la Ley de Vivienda, que, por lo visto, muchos siguen incumpliendo.

Como, por ejemplo, lo que le sucedió a Cristian. En su caso, él fue uno de los afortunados que encontró un alquiler que se ajustaba a sus necesidades. Sin embargo, llegado el momento de firmar el contrato, su casero le dijo que él tenía que ser el encargado de pagar los gastos de la gestión por el arrendamiento: "Me presentaron un documento que eran servicios profesionales para el inquilino", explica. Cristian no dudó en contactar con su abogado tras el pago, quien le confirmó que se trataba de un pago ilegal: "A quien corresponde soportarlos es al arrendador o propietario".

Otro caso es el de Aitana, una joven de 20 años que vive de alquiler en Madrid. Aitana cuenta que estuvo de inquilina en un piso durante tres años y que el casero le subió el alquiler de 800 a 1000 euros de un momento a otro, alegando que la subida se debía "a las leyes del momento" y a que "ese incremento de la subida no iba a ser un beneficio para él, sino para el Ayuntamiento". Teniendo en cuenta que esta subida supera el 2%, es decir, el máximo establecido por la Ley de la Vivienda, estamos ante otro caso que infringe la ley. Del mismo modo, también señala cómo el casero decidió "echar de manera indirecta" a su compañera de piso sin previo aviso: "Mi amiga tuvo que buscar un piso en alquiler donde vivir en menos de 10 días".

Cecilia, por su parte, tuvo que abonar al contado hasta cuatro pagos de fianza para poder acceder al piso que había visto de alquiler. "Al preguntar a la inmobiliaria cuáles eran las condiciones para entrar a vivir, nos pidieron un mes de fianza, un mes de depósito para la garantía, un mes de alquiler, un mes de servicios al inquilino más IVA y un seguro de responsabilidad". En total, unos 2000 euros.

Estos son solo tres de los muchos casos a los que se tienen que enfrentar los interesados en un alquiler, ya bien sea por una habitación o por una vivienda completa. Una preocupación por las condiciones y requisitos ilegales que sacuden desde hace años el mercado de la vivienda en España, a pesar de la reforma de sus leyes.

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