La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha anunciado hoy que el número de empresas públicas autonómicas que se extinguirán se ampliará de las 515 previstas a 708, lo que supondrá un ahorro de 1.500 millones de euros.
Sáenz de Santamaría ha destacado la necesidad de que en tiempos de bonanza no se vuelva a repetir la situación vivida ahora, y por eso ha anunciado que se va a poner en marcha "una nueva ley de régimen jurídico de las administraciones públicas", de manera que se establezca un "sistema muy riguroso para la creación de organismos públicos por cualquier administración".
La vicepresidenta ha hecho estas declaraciones en la inauguración de unas jornadas organizadas por la Asociación para el Progreso de la Dirección (apd) y Deloitte sobre las "reformas y eficiencias del sector público".