Miguel Gila 'revive' en 'Todos los buenos soldados' para desgranar el complejo mundo militar

El escritor David Torres se adentra en el universo militar con una historia de venganzas y muerte ambientada en el Sidi Ifni de finales de los 50, una ciudad en estado de sitio tras la insurrección en el Sáhara.

Allí llega un grupo de cómicos españoles entre los que se encuentran Miguel Gila y Carmen Sevilla para animar a las tropas. Sin embargo, lo que parece una visita cordial se convierte en casi una pesadilla para el cómico cuando un sargento considera su monólogo "Está el enemigo, que se ponga" como una ofensa al ejército.

Poco después se desencadena una serie de asesinatos y suicidios que desestabiliza a todos los miembros de la Legión congregados en la zona. Ya nada volverá a ser como antes y los viejos traumas de la guerra civil se mostrarán más vivos que nunca.

Años más tarde, el reencuentro de Gila con uno de los protagonistas de la historia terminará de desvelar su desenlace, encajando las piezas de un puzzle que se revelará lleno de sorpresas.

Una historia narrada a través de diálogos hostiles, introspectivos o evocadores que sirven para rematar el relato que nos traslada a tiempos desconocidos para muchos.