Michael Jackson no corría riesgo de muerte prematura y sufría vitiligo

El juicio por negligencia impulsado por la familia de Michael Jackson contra la promotora AEG, que contrató a Conrad Murray como médico personal del artista, que tiene lugar esta semana en Los Ángeles, muestra nuevos detalles sobre la vida y de la muerte del 'rey del pop', como que Jackson había consumido una importante cantidad de antidepresivos y que, como el artista había dicho alguna vez, sufría vitiligo, una enfermedad de despigmentación de la piel.

La autopsia confirmó lo que Jackson había dicho para explicar la decoloración que empezó a experimentar su piel en los 80

El jurado ha conocido más datos del informe de la autopsia que realizó el doctor Christopher Rogers. Igualmente, ha podido ver una foto del cadáver de la estrella que no se parece en nada al artista que fue en vida. En su declaración, Rogers ha explicado que la autopsia confirmó lo que Jackson había dicho para explicar la decoloración que empezó a experimentar su piel en la década de los 80: "Tenía vitiligo, así que algunas áreas de su piel aparecían más claras y otras más oscuras".

Sin indicios de muerte prematura del artista
Respecto a la muerte del artista, Rogers ha reiterado que una sobredosis de propofol mató a Jackson, si bien otros sedantes que la mañana de su muerte le dio Murray contribuyeron a su fallecimiento. A juicio del responsable de la autopsia, "no había nada en su anatomía que apuntara a una muerte prematura", ni señales de que fuera adicto a las drogas.

Al parecer, se trata de un asunto importante porque si AEG es declarada culpable, las expectativas de esperanza de vida de Jackson serán proporcinales a la hora de calcular las indemnizaciones. Conrad Murray ya fue condenado a cuatro años de cárcel por homicidio involuntario.