Y en la Semana Santa los tronos hay costaleros y cargadores que no vemos pero que llevan meses trabajando. También ese trabajo lo desempeñan mujeres, un ejemplo lo tenemos, Fran Peraza, en en municipio de Moya, en Gran Canaria.
Llevan dos meses preparándose par un día muy especial para ellas, tienen la responsabilidad de cargar al Cristo de la Buena Muerte el Jueves santo.
Lo primero es prepararse para el esfuerzo que van a hacer.
Cada uno tiene su lugar asignado bajo el trono, el paso pesa cerca de 900 kilos.
24 mujeres lo cargan desde hace 17 años.
Lo hacen movidas por la fe y un sentimiento de compromiso con la semana santa de su municipio.
Emoción y devoción que solo se puede vivir una vez al año.
Y volvemos a La Laguna, que estos días es mucho más que procesiones y devoción porque en torno a ellas se organizan un sinfín de actividades para atraer a más visitantes. Por ejemplo, se ofrecen rutas con la gastronomía propia de estas fechas. Tascas y restaurantes proponen menús de vigilia. Aquí pueden verlos, pero para probarlos hay que ir hasta allí.
Pescado, fresco o salado, garbanzos, verduras de temporada y dulces…es la materia prima para elaborar un buen menú de vigilia, platos que estos días podemos encontrar prácticamente en cualquier restaurante de la laguna. En esta tasca preparan hoy langostino panco con chili dulce.
Un plato con toques orientales para ofrecer algo más que cocina tradicional.
Pero a su propuesta no le faltan platos de siempre como estas garbanzas con bacalao y pulpo.
Y después de una buena comida, el postre que estos días no debe faltar es la torrija, aunque no hay nada mejor para acompañar a una procesión que los tradicionales turrones artesanales.
Y mientras paseamos se respira ambiente de semana santa incluso en los escaparates, que se visten para la ocasión.
Este es el ganador del concurso de este año con el que pretenden potenciar las visitas a la ciudad en estos días.
Iglesias, Calles, escaparates y restaurantes viven así una de las semanas más intensas.
