La marea amarilla inundó el entorno del Estadio de G.Canaria
Más de 28 mil seguidores llenaron las gradas del Estadio de Gran Canaria, más amarillas que nunca. Y aunque remontar el resultado de Zaragoza no era fácil la afición siempre confió en el equipo. En la mente de todos lo ocurrido, hace justo un año, frente al Córdoba. Aprendida la lección, esta vez, ningún aficionado saltó al campo, antes de tiempo. Así se vivió el encuentro. La fiesta comenzaba desde primera hora de la tarde.
Una marea amarilla rodeaba el Estadio de Gran Canaria desde primera hora de la tarde para vivir el partido más importante del año.
A pesar de resultado adverso en Zaragoza, la afición confiaba en el equipo...
Y llegó el primer gol...
El sueño de primera estaba algo más cerca y la firma de ese sueño la puso Araujo, que desataba la euforia con el Estadio.
Esta vez, los únicos que saltaron al campo fueron los jugadores amarillos en el banquillo, el público esperaba impaciente que se pitara el final del partido y entonces llegó la locura.
Los aficionados del Zaragaza a pesar de la pena reconocían que Las Palmas se lo merece.
Y la afición amarilla, saltó al campo, ahora sí, para inmortalizar el momento.
Araujo culmina su gran año en el equipo y Valerón se despedirá de los terrenos de juego a lo grande la próxima temprada en primera división.
